Hacía como una hora que Ranma, Usagi y Akane estaban en el hospital. La mamá de Ranma estaba en un estado un poco delicado. Usagi no quería separarse de su madre y estaba con ella en su cuarto en todo momento. Por otro lado, Ranma estaba inconsolable.
-Si le ocurre algo a mi madre...- se repetía una y otra vez.
-Ranma...- decía Akane tratando de consolarlo- escucha... no tiene caso lamentarse, lo que ocurrió ya pasó y no se puede hacer nada para evitarlo...
-Akane...- Ranma la miró a los ojos- gracias por todo... en verdad gracias...
Akane se sonrojó un poco, toda esta escena hubiera seguido perfecta de no haber sido por...
-¡¡Nihao Ranma!!- dice Shampoo entrando a la sala de espera- dicen que tu mamá está muy enferma... ¡¡no te preocupes!! ¡¡con estos tallarines se curará muy pronto!!
-Esa Shampoo- pensó Akane- no se acostumbra a que Ranma la rechaze...
-Gracias, Shampoo- le dijo Ranma- eres muy amable.
-¿Qué?- pensó Akane sorprendida.
-¡¡Oh Ranma!!- dijo Shampoo abrazándolo- ¡¡te quiero mucho!!
Para sorpresa de Akane y alegría de Shampoo, Ranma le devolvió un poco el abrazo; en vez de rechazarla como de costumbre.
-No lo puedo creer!!- pensó Shampoo- ¡¡estoy en sus brazos!!
Akane no soportó más y se fue.
-Ese cretino- decía cada vez más fuerte- ¿así me paga que me preocupe por él?? ¿abrazando a otra? ¡¡qué ingrato!!! ¡¡no me importa que se quede con la tonta de Shampoo!! ¡¡me da igual!!
-Señorita- le dijo una chica
-¿Qué quiere?- dijo Akane groseramente.
-¿Podría hacer silencio?- dijo otra enfermera.
Entonces Akane recordó que se encontraba en un hospital.
Mientras todo esto ocurría, Usagi permanecía esperando noticias del doctor. Al poco rato llegó Akane a su lado.
-Hola- dijo la recién llegada.
-Hola Akane...- dijo ella con voz apagada.
-¿Cómo sigue tía Nodoka?
-Igual... estoy preocupada... pero- Usagi la miró a los ojos- ¿estás bien?
-¿Por qué la pregunta?
-Es que... pensé que mi hermano vendría contigo
-No, lo que ocurre es que él prefirió quedarse con Shampoo- dijo Akane dirijiendo
la mirada hacia otro lado.
-Es por eso que estás así- pensó Usagi- en verdad lo quiere mucho...
El doctor entró al cuarto, Usagi y Akane lo miraron con impaciencia.
-Srta. Saotome- dijo el doctor- debo hablarle con sinceridad...
La voz del doctor no se oía muy optimista, lo que hizo que las chicas se
preocuparan más aún.
-Dígame doctor... ¿qué ocurre con mi madre?
-Su madre tiene varias hemorragias internas, sin embargo; la más grave se encuentra
cerca del corazón. Hemos intentado no operarla por su estado delicado... hemos
tratado de esperar a que ella reacciones, pero si no vuelve en sí tendremos que
operarla...
-Si la operan así...
-Es muchísimo más peligroso- concluyó el doctor.
-¿Se puede salvar?- preguntó Akane.
-No les aseguro nada- dijo el doctor antes de irse.
Al poco rato, Ranma entró al cuarto de su madre.
-¿Cómo sigue?- preguntó él.
-Muy mal... si no reacciona, la operarán así como está- dijo Usagi al borde del
llanto.
-¿Eso qué significa?- preguntó él.
-Que está en grave peligro...
-¿Para cuándo la operaran?
-El doctor dijo que esperarán hasta un máximo de dos días- dice Akane sin mirar a
Ranma. Él notó que Akane se veía triste.
Ella salió de la habitación, Ranma la siguió antes de despedirse de Usagi y su madre.
-¡¡Akane!!- le dijo de camino a casa, pero ella no se detuvo. Ranma corrió tras
ella; pero ella ni lo miró. Ranma se desesperó y la tomó del brazo, obligándola a
mirarlo a los ojos.
-Akane...
-¿Qué quieres?- dice evitando su mirada.
-¿Qué te ocurre?
-Nada... nada... sólo que me encanta ver cómo abrazas a Shampoo!!!
-Oye... no es mi... ¿acaso estás...
-¡¡¡Ni loca!!!- no lo dejó terminar la frase.
-¿Entonces porqué estás tan enojada?- preguntó.
Akane se puso más roja todavía y siguió caminando.
-¡¡No te importa!!- le dijo, pero no se dió cuenta de que había una piedra y
tropezó, Ranma instintivamente la sostuvo en sus brazos justo antes de que
cayera. Akane casi se pone como tomate, por lo que evitó mirar a Ranma.
-Akane... lo siento- dijo él en un susurro.
-¿Por qué?
-Porque siempre termino haciéndote enojar...- dijo bajando la mirada.
-No te preocupes- dice poniéndose de pie- de todas formas siempre exagero las
cosas...
-Bueno... ¿vamos a casa?- preguntó más tranquilo.
-Claro...
-Disculpen- se escuchó una voz varonil que provenía de las sombras.
-¿Quién es?- preguntó Ranma.
-Es que estoy buscando a alguien...- entonces, el chico apareció de entre las
sombras. Estaba vestido con un pantalón verde y una camisa negra.
-¿A quién buscas?- preguntó Akane acercándose al chico.
-Verán, es que vengo buscando a mi novia...- dice el chico- pero primero tenía
que encontrar a .... Saotome... Saotome Ranma...
Akane y Ranma intercambiaron miradas.
-Yo soy Ranma Saotome
Ante esto, la mirada del chico cambió totalmente. Parecía de odio.
-¡¡Tú!! ¡¡Ranma Saotome!! ¡¡te espero mañana en el parque al mediodía!!
¡¡es un reto!!
-¿Qué?- dice Akane- pero esto es absurdo!! ¡¡ni siquiera lo conoces!!!
El chico miró a Akane.
-Es que él es un impedimento para que la chica que amo responda a mis
sentimientos- y al decir esto se fue.
Ranma y Akane quedaron totalmente desconcertados.
-¿Pero quién demonios era ese chico?- preguntó Ranma.
-No lo sé...- dice Akane- pero dijo que tú eras un impedimento para que su amor
fuera correspondido... oye ¿no tendrás otra prometida por allí?- se le oye un poco
molesta.
-¿Qué? ¿cómo crees acaso piensas lo peor de mí?- pero se dió cuenta de que Akane
ya había emprendido el paso.
-Por qué será que no te creo- le dijo.
Al llegar al Dojo, Akane se encerró en su habitación y se durmió. Al día siguiente
se despertó y se dió cuenta de que Ranma no estaba en la casa.
-¿Dónde estará?- se dijo.
-No te preocupes, dijo que iría a entrenar para su reto- dice Nabiki como
adivinándole el pensamiento.
-De todas formas no me importa lo que le ocurra- le contestó.
Akane salió con Nabiki al hospital, allí se encontraba Usagi; junto con Ukyo.
-Hola- saludó al llegar- ¿cómo sigue?
-Igual- dice Usagi a punto de llorar otra vez.
-No te preocupes- la animó Ukyo- se repondrá... es la mamá de Ranma... y él no
sacó toda la fortaleza de su padre...
Usagi sonrió levemente, aunque se veía que estaba muy preocupada.
-Pero ¿y Ranma?- dice Ukyo.
-Él está entrenando para un duelo- dice Akane sin dar más detalles.
-Ése hermano mío- se burló Usagi- no puede vivir sin andar probando que es el
mejor de todos...
Tres intercambiaron leves sonrisas, menos Nabiki; a quien se le veía un poco triste.
Akane lo notó.
-¿Ocurre algo?
-No, nada...- entonces pensó- ay Akane... si supieras...
Akane miró su reloj, era casi mediodía. Nabiki lo notó, salió corriendo hacia el
parque.
Mientras, Ranma se encontraba peleando con el extraño chico. La pelea iba a la
par, los dos tenían casi igual poder.
-Veo que no peleas tan mal- dice el extraño chico.
-Así es, nunca he perdido en un combate- dice.
-¿Pero qué...- antes de poder terminar la frase estaba a unos centímetros bajo
la tierra.
El chico se puso para asestarle el tan famoso "golpe de gracia", pero no pudo
porque repentinamente una bicicleta se estacionó en su cabeza.
-¿Qué demonios...- entonces sintió el golpe de una chica y salió a volar por los
aires.
-¡¡Ranma!!- dice Shampoo- ¿estás bien?
-Claro... nunca he estado...- entonces se desplomó en el suelo.
-Mi amor... no te preocupes....- Shampoo le ayudó a salir y a ponerse en pie.
-Gracias...- dice él apoyándose en ella.
En ese momento llegó a la escena Nabiki. Ranma la vió y pensó que tendría que
pagarle para que Akane no se enterara de esta "escenita" con Shampoo, pero en
lugar de ello, vió como ella sólo que quedaba allí parada sin decir palabra. Bajó
lentamente su mirada y una lágrima corrió por su mejilla, aunque pasó inadvertida
para Ranma y Shampoo.
-Esto me pasa por ilusa- se dijo Nabiki.
-Te amo- dice Shampoo antes de besarlo ante los ojos de Nabiki.
Ranma trató de oponerse al beso, pero debido a la pelea no tenía muchas fuerzas.
-¡¡¡¡RRRAANNNMMAAAAA!!!- gritó una voz. Era Akane.
-¿Akane?- dice Ranma- no, no vayas a pensar lo que no es... es que... esto es un
error... en serio...
-¿Un error? ¡¡¡no lo creo!! ¡¡no lo creo!! ¡¡eres un idiota!! ¡¡te odio!! ¡¡te odio!!
-No... Nabiki...- decía Ranma aún atado a los brazos de Shampoo- tú viste lo que
ocurrió... díselo... ¡¡Nabiki!!- pero ya era tarde, Nabiki había salido corriendo del
lugar, por alguna razón, las palabras "te odio" que Akane le había dicho a Ranma
la ponían feliz. Corría para poner en claro lo que estaba sintiendo.
-¿Qué me pasa?- se decía una y otra vez.
Esa noche se dirigió al Dojo, para escuchar una fuerte discución entre Ranma y su
hermana menor.
-Akane ¡¡te digo que ella me besó!!
-¡¡No es cierto!!!- decía ella- ¡¡no te creo!!!
-Es cierto...
-¡¡Eres un cínico!!- repetía- ¡¡¡te odio!!! ¡¡te odio!!
Nabiki escuchaba todo detrás de la puerta de la habitación de Akane. Se escuchó
un silencio.
-¿En serio?- dijo Ranma con la voz apagada.
Hubo otro silencio.
-¿En serio me odias Akane?
Akane no respondió.
-Sí...- titubeó- no... ¡¡¡maldita sea no sé!! ¡¡no sé!!- dijo antes de sumirse en
llanto.
Nabiki se sorprendió al escuchar a su hermana.
-Akane... voy a tratar de hacer que descubras si me odias o no...
Nabiki temió lo peor.
-Ranma...
Nabiki sentía que su corazón iba a estallar.
-¿Qué dices si tenemos una cita mañana?
Nabiki esperaba una respuesta negativa, quería que así fuera.
-Claro- dijo Akane, se le escuchaba feliz.
Eso fue la gota que derramó el vaso. Ranma y Akane escucharon un sollozo proveniente de la puerta. Ranma abrió la puerta, pero no vió a nadie. Ambos se preguntaron de quién podría ser. Ellos no sabrían que se trataba de Nabiki, ella era la que lloraba, aunque no sabía por qué.
Notas: bueno, creo que en este capítulo les dejé algunas interrogantes.
1. ¿quién era ese chico?
2. ¿despertará la mamá de Ranma?
3. ¿qué es lo que Nabiki está empezando a sentir?
4. ¿Ranma y Akane tendrán esa cita?
Je, je, je... ya les dije al principio que TODO, absolutamente TODO puede pasar en
este fic.
Esto es para los amantes de lo extraño, aún no sé cuanto tiempo me tome terminarlo
pero no creo que sea poco, creo que le voy a dar unas cuantas vueltas a la historia.
El tercer capítulo demorará un poco más porque voy a estar ocupada, además que
tengo que planear bien lo que ocurrirá en el tercero, pero si ahora les habrán parecido
jamón con queso; prepárense porque (les aseguro) que los dos siguientes capítulos
serán una BOMBA ATÓMICA.
No se lo pierdan.