Esa mañana el sol penetraba fuertemente en la habitación de Akane. Ella aún estaba medio dormida y no estaba en sus planes despertarse por el momento.
Al despertarse, se dió cuenta de que Genma y Ranma estaban discutiendo.
-¡¡Ya te dije que no pienso hacerlo!!- gritaba Ranma
-¡¡Eso no está a discusión!!- le decía Genma muy disgustado.
-¡¡NO y es mi última palabra!!!- dijo Ranma realmente furioso.
-¿Qué ocurre aquí Kasumi?- preguntó Akane aún frotándose los ojos.
-Bueno Akane, lo que ocurre es que no hace mucho el tío Genma y Ranma recibieron una carta de Usagi que decía que la mamá de Ranma llegaría en estos días, para que Genma y Ranma le explicaran personalmente lo de la maldición- dijo Kasumi con su habitual sonrisa.
-Y lo que ocurre es que el tío Genma no quiere que Ranma y él estén presentes para cuando llegue la Sra. Nodoka- agregó Nabiki.
-Sí... como la otra vez...- murmuró Ranma.
Akane se quedó callada, aún no se despertaba bien y no tenía ganas de entrometerse en una discusión entre Ranma y su padre, así que salió del comedor sin decir más nada. A Ranma le extrañó un poco ese gesto, ya que usualmente Akane no era así.
Poco despúes, él entró al Dojo y se encontró con ella.
-Hola...- dijo él.
-Hola...- dijo ella sin quitar la vista de los ladrillos que utilizaba para entrenar.
-Oye... y ....
-¿Qué quieres?- dijo ella mirándolo a los ojos.
-Nada... es que... yo... quería saber tu opinión con respecto a lo de mi mamá...
-Ese es un asunto entre tú y el tío Genma... no me metas a mí en esto- dice ella volviendo a ponerse en posición para romper los ladrillos.
-¿Sabes?- dice Ranma- tal vez mamá quiera que papá y yo nos vayamos a vivir con ella y Usagi...
-¡¡¡Ay!!!- las palabras de Ranma habían hecho que Akane perdiera la concentración y golpeó mal los ladrillos, de su mano brotaba algo de sangre.
-¿Estás bien?- dijo Ranma observando el hilo de sangre que recorría la mano de Akane.
-Sí... eso creo... ¡¡ay!! ¡¡duele!!- se quejó ella.
Para su sorpresa, Ranma tomó cuidadosamente su mano y la inspeccionó como un médico, luego le dijo.
-No es grave, sólo hay que limpiar la herida bien para que no se infecte- dijo
-Gracias- dijo Akane- voy a pedirle a Kasumi que me ayude.
Mientras buscaba a Kasumi, las palabras de Ranma hacían eco en la cabeza y en el corazón de Akane.
"Tal vez mamá quiera que papá y yu nos vayamos a vivir con ella y Usagi"
Realmente Akane sentía algo por ese comentario. ¿Felicidad?. No. Desechó esa opción al instante. ¿Tristeza?. No estaba segura. ¿Miedo?. Sí, definitivamente un sentimiento que rondaba su corazón en esos momentos era el miedo. ¿A qué?... a perder a Ranma. Unas cuantas lágrimas recorrieron sus mejillas.
-Ranma... ¿irse de aquí?- murmuró.
-Akane... ¿qué le ocurrió a tu mano?
-Kasumi... casualmente te buscaba...
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Ranma estaba sentado en el Dojo. Pensaba en la forma en que Akane se había lastimado. Se había lastimado justamente cuando él mencionó el hecho de tener que irse a vivir con su madre.
-¿Le afectó tanto?- dijo cambiando de posición y acostándose en el piso del Dojo.
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Ukyo se había levantado tarde ese día. Había dormido realmente mal la noche anterior; había algo que la preocupaba, algo que no la dejaba tranquila; pero no podía definir que era.
Entonces la puerta del Dojo se abrió bruscamente, dejando ver la silueta de un persona, una chica, a la que Ukyo no reconoció.
-¿Sí? ¿qué quiere que le prepare?- dijo, pensando que se trataba de un cliente.
-¿Eres Ukyo? ¿verdad?- dijo la chica mirándola fijamente, sólo entonces Ukyo se dió cuenta de que la chica tenía unos hermosos ojos azules.
-Sí... yo soy Ukyo... ¿y tú?
-¿Acaso no me recuerdas?- dijo la chica acercándose cada vez más a Ukyo.
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Akane ya estaba vendada y se encontraba en su habitación. Alguien llamó a la puerta. "Adelante, está sin cerrojo" contestó. Se sorprendió al ver que era Ranma.
-¿Qué pasa?- dijo él- ¿por qué te quedaste como sorprendida?
-Es que no creo que hayas venido a ver como estaba mi brazo- dijo ella en tono frío
-Pues, ahora que lo mencionas ¿cómo está?... veo que ya está vendada- dijo observando la mano de Akane.
-Sí... pero no creo que haya sido sólo por eso por lo que viniste...
-En realidad no... yo... quería hablar contigo... sobre ... algo muy serio....
-Dime- dijo ella que realmente no se imaginaba de qué quería hablar Ranma.
-Pues... del compromiso...
El corazón de Akane pareció dejar de latir por una milésima de segundo. Nunca pero NUNCA se hubiera imaginado que Ranma estuviera frente a frente suyo y que le estuviera hablando del compromiso en forma seria.
-¿De qué quieres hablar exactamente?- dijo ella con miedo.
-Pues... Akane, nuestros padres fueron los que nos comprometieron incluso antes de nacer; antes no podía preguntarte esto pero, creo que ya hemos pasado por suficientes cosas y...
-Dime...- Akane tenía miedo sobre lo que él pudiera decir.
-Realmente... tú... eres... ¿feliz siendo mi prometida?... es decir ¿yo te gusto?; Akane es que si yo creo que probablemente mi mamá me pida que finalmente escoja a una de mis "prometidas" y creo que ya sé las respuestas de Shampoo, Ukyo y Kodachi pero... tú... yo realmente no sé lo que sientes tú... ¿Akane?
Akane tenía su mirada fija en el suelo. Ella no tenía el valor de mirar a Ranma a los ojos. Sentía que aún no estaba lista para responder a esa pregunta. Aún no tenía bien definido lo que realmente quería de su compromiso con él.
-Akane...- sólo entonces pensó en la "remota" posibilidad de que podría haberla hecho enojar- ¡¡lo siento!! ¡perdóname si fui un insensible y un tonto!!
-Ranma- murmuró ella aún con la mirada en el piso- ¿realmente quieres saber?
Hubo un silencio entre ambos.
-¡¡Chicos!!- dijo Kasumi- ¡¡Ranma!! ¿a qué no adivinas quién llegó?
-Pues... ¿quién?
-¡¡Usagi!! ¡¡tu hermana está aquí!!- dijo Kasumi más feliz que lo acostumbrado.
Esto tomó por sorpresa a Ranma y Akane por igual. Aunque para tranquilidad de Akane eso impidió que ella le tuviera que responder.
-¡¡Hermano!!- dijo Usagi entrando al cuarto y abrazando a Ranma.
-Usagi ¿qué ocurre?- dijo él.
-Te noto preocupada- dijo Akane.
-Pero... ¿mamá no está aquí?- preguntó Usagi un poco confundida- creí que ella llegaría mucho antes que yo...
-¿Por qué lo dices?-dice Akane.
-Bueno Akane, es que ella tomó un tren hacia Nerima y yo también; pero el mío salía 30 minutos después que el de ella... ella debió llegar antes... hace como media hora...
-Tal vez se retrasó ¿no crees?- dijo Kasumi con una bandeja de té- ¿quieres?
-No gracias Kasumi- dijo ella.
-Usagi... estoy dispuesto a contarle a mamá todo esta vez, sin excusas ni pretextos
Una hermosa sonrisa se dibujó por primera vez en el rostro de Usagi.
-Me alegra Ranma... ahora sólo hay que esperar a que regrese...- dijo ella.
Pero pasaron dos horas más y no llegaba Nodoka. Ya era casi de noche y Nodoka no se presentaba a la casa Tendo.
-Esto ya me preocupa Ranma- dijo Usagi- ¿y si pasó algo?
La puerta principal de los Tendo se abrió de par en par. Usagi y Ranma corrieron hacia la puerta, pero se trataba de Nabiki.
-Nabiki...- dijo Akane, quien pensaba también que era Nodoka- pero... ¿porqué llegaste tan tarde?
-Es que estaba con una amiga que trabaja de voluntaria en el hospital- dijo ella- lo que ocurre es que hubo un terrible accidente y en el hospital regional están como locos y necesitaban bastante personal, especialmente de recepcionista y como me pagaron 1000 yenz la hora, pues no me rehusé
-Tú no cambias...- dijo Akane.
La palabra "accidente" resonó en la mente de Usagi.
-¿Accidente?- dijo Usagi- ¿dónde? ¿qué ocurrió?
-Fue en unas vías de tren cerca de Nerima... creo que fue el viaje... a ver... el viaje...
Usagi esperaba que no pronunciara los números...
-... 360 diurno... sí ése era.
Usagi sentía que tenía todo el peso del mundo sobre sus hombros. Estaba pálida y si Ranma no la agarra, se desploma.
-¿Qué ocurre Usagi?- dijo él
-Ése era... el tren de mamá- dijo en un susurro.
Fin
Notas: UF!! creo que ahora sí comencé algo serio.Me voy a inspirar completamente para hacer una muy buena historia. Les advierto que este fic no será cómico.
Para comentarios escribir a:maral15@yupimail.com
Atte,
Marissa Cervantes.
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