Secuela de: “Valor para el Amor”
Suki da yo.
Por: Marissa C.
Sora se despertó y
observó su calendario. Tenía marcado con un círculo el día de hoy, porque
regresaba una de sus mejores amigas. Tenía unas ganas de contarle todo lo que
había ocurrido con Tai ^_^ aunque también lo de Matt =( quien aún los evitaba a
ambos y no salía a menudo con el grupo. Ella no había tenido la oportunidad de
hablar con él, quería disculparse, arreglar las cosas. Matt era su mejor amigo,
no quería perder su amistad así.
-¡¡Sora te llaman por teléfono!! ¡Es Hikari!!- le anunció su madre. Sora
contestó la llamada desde su recámara.
-Hola Kari-
-Hola Sora ¿Lista para ir al aeropuerto?- se escucha desde el auricular.
-Sí, nada más me doy un baño y paso por tu casa para irnos juntos ¿de
acuerdo? Por cierto Kari, ¿no sabes si va a ir Matt?- pregunta esperando que el
chico se presente.
-La verdad no lo sé.
-¿Puedes averiguarlo, por favor?
-¿Eh? ¿Yo?- Kari se oía un poco insegura- bueno… está bien.
-¡¡Gracias!! Cómo en media hora estoy en tu casa ¡¡Así que me despiertas a
Tai!!
-Hasta entonces- dice Kari cerrando la llamada.
Sora colocó en teléfono sobre su mesita y se apresuró a tomar un baño.
Mientras Kari daba un profundo suspiro. ¿Por qué tenía que ser ella quien
llamar a Matt? Se sonrojó de nuevo de sólo pensar en él. Tomó el teléfono
nuevamente y marcó el número de la residencia Ishida.
-Casa Ishida- Kari se dio cuenta de que era la voz de Matt.
-Yo…
-¿K-chan?- Matt reconoció la voz de Kari.
-Sí, soy yo. ¿Recuerdas que Mimi regresa hoy de USA?- dice sintiéndose
menos nerviosa.
-Sí ¿Por qué?-
-Es que íbamos a recibirla. Me preguntaba si tú irías con nosotros- Kari
cruza los dedos al decir estas palabras.
-Mmm… ¿quiénes irán?- pregunta.
-Todos ¿Por qué?- Kari iba perdiendo las esperanzas.
-No sé. Mejor no.- Matt iba a colgar, se oía distante, pero Kari no se lo
permitió.
-¡¡Vamos!!- se oye molesta- ¡¡es nuestra amiga!! ¿O no?
-Pero…
-¡¡Nada de excusas Yamatto Ishida!! ¡¡Te quiero bañado y vestido en media
hora!! ¿Entendido?- dice la chica decidida a que Matt vaya con ellos.
-Es que…
-¿Entendido?- vuelve a repetir. Haciéndole saber que no tiene otra opción.
-Sí, comandante Kari!- se burla Matt- ¡estaré listo! ¿Alguna otra orden
más?
-No- ríe ella también- puede ir a cumplir con lo que le he dicho…
-¡¡Al paso!!- dice el chico.
-¡¡Fantástico!!- Kari da un saltito en un pie al ver que ha triunfado-
entonces te vienes a mi casa cuando estés listo. ¡Sora también viene con
nosotros!
-¿Sora? ¿Ella va a ir a tu casa? No, no te preocupes, yo me encuentro con
ustedes allá.
-Pero…
-¡¡Nada de excusas Hikari Kamiya!!- dice imitando la actitud de Kari-
¡¡Ahora arréglese y deje que yo cumpla con mis obligaciones!!- dice cerrando el
teléfono.
-Matt- suspira sonrojada- Matt…
-¿Kari?- es Tai quien tiene ojos adormilados- ¿con quién hablabas?
-¡¡Con Matt!!- da un brinco otra vez- ¡¡va a venir con nosotros!!- abraza a
su hermano y luego corre a su cuarto- ¡¡Voy a arreglarme!!
-¿Y por eso estás tan feliz?- dice con fastidio, pero luego observa como su
hermana menor se aplica el maquillaje sin dejar de sonreír- un momento… ¿y esa
miradita coqueta? ¡¡Es porque vas a ver a Takeru!! ¿Me equivoco?
-¡¡Piensa lo que quieras!!- se sonroja- la verdad es que quiero que Mimi
vea que yo también he cambiado mucho!!- aunque en realidad quiere que Matt le
vea bonita, pero trata de disimularlo lo más que puede y lo consigue, ya que su
hermano le da la espalda.
-Lo que tú digas, voy al baño…
-Hermano fastidio- piensa.
Poco después los chicos estaban reunidos en el aeropuerto. Sólo faltan
Takeru y Matt.
-El avión de Mimi debe llegar en 20 minutos- dice Joe mirando su reloj.
-¿Y Matt?- piensa Kari mirando hacia todos lados buscando al chico- Me dijo
que vendría…
-¡¡Chicos!!- era la voz de Takeru- ¡¡aquí estoy!!
Todos voltearon al oír la voz del chico. Kari se entristeció al ver que no
venía con Matt.
-¡Casi no llego!!- dice respirando apresuradamente.
-¿Y Matt?- pregunta Kari.
-No sé. No me dijo nada de venir juntos.
Kari se sentó un poco alejada del grupo, quien conversaba animadamente. El
tema en vigencia aún era el noviazgo de su hermano con Sora y ella,
francamente, ya estaba harta de oír hablar de eso.
-¿Ocurre algo?- pregunta Sora sentándose a su lado- te noto triste.
-No es eso…- suspira.
-Yo también quería que Matt viniera- dice mirando al techo- tengo que
hablar con él… es mi mejor amigo…
-Te amaba… te ama mucho- dice mirando a Sora.
-Sí, y yo de tonta que ni lo noté. Me siento culpable ¿sabes? demasiado,
cada vez que beso a tu hermano me asalta ese sentimiento de culpa…
-Entonces la mayoría del tiempo te sientes culpable- sonríe con malicia-
porque lo que más haces es besar a mi hermano…
Sora se pone de todos los colores mientras Kari ríe divertida.
-¡¡Chicos!!- todos escuchan una voz- ¡¡aquí estoy!!
Todos voltearon y se dieron cuenta de que se trataba de una hermosa joven.
Sus cabellos eran de un tono rosa, tenía puesta unos pantalones negros y una
camisa sin mangas de color blanco. Ella les sonreía, sin embargo todos estaban
confundidos hasta que Sora reaccionó.
-¿Mimi?- pregunta- ¿en realidad eres tú?
-¡Cierto!- dice Kari parándose- ¡ya había olvidado que te habías cambiado
el color de cabello!
-¡¡Hasta que reaccionan!!- sonríe- ¡Creí que ya me habían olvidado!! Pero
por lo que veo ustedes también han cambiado algo. ¡Te ves mejor sin el sombrero
Sora! ¡Y tú estás más guapo Izzy!- dice provocando que el aludido se sonroje-
¡Superior se ve tan distinto! ¡Kari ya eres toda una señorita! ¡Takeru ahora sí
que estás cambiado!! ¡Y Tai…- la chica lo examina- bueno… cambiaste la forma de
¿vestir?…
Una gran gota de sudor se instala en la cabeza de Tai y provoca la risa de
todos los presentes.
-Espero no haber llegado tarde- una voz varonil se escucha a espaldas de
todos, quienes se voltean para encontrar a un chico rubio. Vestido con unos
pantalones azules y una camisa negra.
-¿Matt?- pregunta Mimi, intenta acercase pero no lo consigue porque una
rosa se interpone entre ambos. Ella toma la flor y se sonroja.
-Bienvenida a casa M-chan…
El chico le sonríe.
-Vaya… tú sí que sigues siendo un chico guapo- dice evitando su mirada,
porque está muy sonrojada.
A Kari le disgusta este gesto y quita la mirada de la escena.
-¿Pasa algo?- pregunta Matt acercándose a ella.
-Nada- dice cortante- no me pasa nada…
-Está muy cambiada- dice mirando a Mimi…
-¿Te parece bonita?- pregunta aún sin mirarlo.
-Bueno… no me espera verla tan cambiada.
-Ya veo…- Matt le coloca una mano en el hombro. Ella siente que su corazón
late cada vez más fuerte. Taichi observa esa escena y se le ocurre jugarle una broma
a Yamatto y a su hermana menor.
-¡Matt cuidado que terminamos siendo cuñados!- se escucha la voz de Tai.
-¡¡Hermano!!- se voltea Kari sonrojada- ¿cómo piensas esas cosas?- pero
Kari nota que Matt sólo ve cómo las manos de Tai y Sora están juntas. Cuando
Sora nota esto se suelta de la mano de su novio inmediatamente.
-Matt…- se acerca un poco a él- yo… quería hablar contigo.
-Creo que este no es el momento- dice sin mirarla- vamos con Mimi… ¿sí?
-Matt…- Kari le llama- ¿después podemos salir un momento?
-Claro K-chan, pero primero voy a salir con Mimi. Dice que quiere hablar
conmigo…
-Ah…- suspira enojada.
-¿Qué dices, Kari, vamos al cine?- dice TK.
-Está bien, luego nos vemos, Matt- dice tomando a TK por el brazo.
-Sigo insistiendo en que terminaremos emparentados- dice Tai viendo a los
dos chicos alejarse.
-Si tú lo dices…- suspira Matt.
-Oye Matt. Es que quería hablar contigo sobre…- Tai es interrumpido por
Mimi quien se prende del brazo de Matt.
-¿Ya nos vamos??!!- sonríe.
-Sí. Hablamos después Tai- dice alejándose con Mimi.
Mimi y Matt se dirigen a una cafetería cercana. A pesar de conocerse muy
bien, ambos se miran como si fueran unos desconocidos. Para Matt la jovencita
que tiene frente a él no es para nada comparable con la niña caprichosa y llorona
que conoció alguna vez en el Digimundo; quien tenía al frente era toda una
mujer, de hermosas facciones y delicados gestos, que devoraba tranquilamente su
copa de helado, totalmente ajena a sus pensamientos. Sin embargo, justo en ese
momento Mimi está pensando en Matt, en ese joven solitario y serio, ese niño
que se dedicaba a cuidar de su hermano menor y que siempre le pareció muy frío
de carácter, muy indiferente. Esa era la idea que siempre había tenido de
Yamatto Ishida, de él nunca se hubiera esperado ese gesto tan tierno de
regalarle una rosa. En vano trataba de centrar su atención en el helado de
fresa que estaba ingiriendo con suma calma, para no tener que levantar la vista
en algo de tiempo, al menos hasta que los latidos de su corazón se normalizaran.
-¿Y bien? ¿Cómo te ha ido en USA?- preguntó Matt rompiendo el silencio.
-Bien- dice aún sin poder levantar la vista- en realidad al principio como
que no encajaba en la vida tan apurada que tienen allí, pero poco a poco me fui
acostumbrando a todo…
-Se ve- dice observando los cabellos de la chica- te queda bien el rosado…-
sonríe.
-¿Qué?- entonces ella entendió el mensaje y alzó la mirada, encontrándose
con la sonrisa de su acompañante, se llevó una mano a la cabeza y tomó un
mechón de sus rosados cabellos- bueno… creo que fue en uno de esos momentos de
locura que nos dan a cada uno… pero me parece que acerté…
-¡Imagínate que te lo hubieras teñido de rojo o hasta de verde!- dice Matt
sonriendo.
-En realidad al principio sí pensé en ponérmelo de rojo- dice apenada- pero
luego decidí ponerme el rosado…
-Te dije que te queda bien…
-Sí… bueno, gracias…eh… ¿y tú como has estado? Sora me contó lo ocurrido
y…- ups, Mimi se detuvo en seco, observó la reacción de Matt, que fue colocar
su mirada seria.
-¿Te lo contó todo?- preguntó en ese tono frío e indiferente.
-Sí…- trató de sonreír.
---
La película que Kari y Takeru veían era bastante aburrida y monótona, pero
era la única que quedaba, todas las demás funciones estaban en lleno total.
Kari le prestaba más atención en comer su barra de chocolate que en lo que
decía el protagonista de la cinta, no podía dejar de pensar en lo que estarían
haciendo Matt y Mimi en su “cita”, ese calificativo de “cita” no le agradaba en
lo más mínimo. Por su parte Takeru la observaba de lo más absorto, contemplando
cada detalle de su rostro.
-Kari…- susurró.
-¿Sí?- ella se volteó hacia su amigo.
-Es que… hace tiempo que quiero decirte algo… que… bueno… es muy importante
para mí…
-Dime qué es, sabes que puedes contar conmigo… somos amigos ¿no?- sonríe.
-Kari… yo…- Takeru no resistió más y posó sus labios sobre los de ella,
tratando de demostrarle cuánto la amaba, tratando de transmitirle ese
sentimiento que hacía años vivía en su pecho. Kari por su parte no quería ese
beso, pero estaba totalmente paralizada, no podía separarse de Takeru. Ella no
deseaba que esto sucediera, siempre tuvo a Takeru como un gran amigo, como un
hermano más, alguna vez llegó a amarlo como a nadie, pero eso había terminado.
Ese beso tenía que haber sido antes, cuando amaba a Takeru, no podía ser ahora;
cuando ella quería a Matt.
-Suki da yo Kari…- le dijo cuando se separó de ella- desde siempre…
Él esperó una respuesta afirmativa, tenía que ser afirmativa. No podía ser
que ella no le quisiera. Eran amigos desde la infancia; no podía ser que la
dulce sonrisa que Kari siempre le regalaba no fuera de amor.
-No…- susurró negando la cabeza. Sacó fuerzas de la nada y se levantó
corriendo lo más rápido que pudo y salió de la sala, del cine, sin mirar atrás;
dejando a Takeru más confundido que nunca.
Caminó por varios minutos sumida en sus pensamientos, sin saber a dónde ir.
-Veo que has crecido más de lo que imaginé… ese rostro es por problemas
amorosos ¿o me equivoco?- escuchó la inconfundible voz de Mimi.
-Algo así- respondió- ¿y tu cita con Matt?
-Nada importante- dice sentándose en una banca (estaban en un parque) e
invitando a Kari a imitarla.
-¿Qué te ocurre?- pregunta Mimi.
-Nada especial…- suspira- es sólo que todo está mal…
-¿Algo con Takeru?- sonríe- ¡él te adora! ¡No te preocupes!
-¡¡Precisamente es eso!! ¡¡Él me quiere y lo sé!! ¡¡Pero yo no!!… al menos
no como él quisiera…
-Por Dios- la mira Mimi extrañada-
eso quiere decir que tú…
-¡¡Claro que no!!- se enoja- ¿Por qué todos piensan que estoy enamorada de
él?
-Bueno… es que la verdad…
-¡No son quienes para saber quién me gusta o no!
-Tienes razón- se disculpa Mimi- creo que eso no fue muy maduro…
-¿Sí? ¡Díselo a Tai!- suspira con enojo y a Mimi no le quedó otra que reír
a carcajadas- ¡¡no te burles!!
-¡¡No es por eso! ¡Es sólo que ahora sí comprobé que Tai no ha cambiado en
nada!!
-Uff… bueno el punto es que Takeru me besó y yo no podía rechazarlo… porque
te juro que me quedé como estática… luego salí del cine a toda prisa…
-Curioso… yo hice lo mismo…
-¿Tú?- ahora era Kari la sorprendida.
-Me fui de la heladería en donde estaba con Matt…
-¿Por qué?- pregunta Kari
sorprendida.
-Es que Matt… tú sabes es
guapísimo…- las mejillas de Kari y Mimi se sonrojaron casi al mismo tiempo- él
es muy guapo… pero es que es a veces tan frío. Sé que me miraba con cierto aire
“extraño” pero yo no pude evitar recordar que, por muy cambiado que esté ahora,
siempre será alguien solitario, indiferente y frío; y estoy segura de que jamás
podría estar con alguien como él… de modo que opté por irme…
-¡¡Matt no es ningún
chico frío!!- estalla Kari- ¡¡Al contrario!! ¡¡Es muy tierno!!
-¿Cómo sabes eso, si no
eres de su confianza?- Mimi está extrañada de la reacción de Kari.
-Bien… te diré.
¿Recuerdas cuando se enteraron que era la Octava elegida? ¿Recuerdas que Tai y
Matt me escondieron para evitar que el enemigo me encontrara? Pues Tai tuvo que
irse junto con Agumon, dejándome sola con Gabumon y Matt. Yo estaba muy
preocupada por Tai, no sabía si venceríamos al enemigo, después de todo, era
sólo una niña. En ese momento, como tratando de encontrar a alguien que me
corroborara las esperanzas, le pregunté a Matt si mi hermano estaría bien… él
me contestó muy fríamente que estaba seguro que Tai no podría con eso… al
escuchar eso todas mis esperanzas se vinieron al suelo… y comencé a llorar…
-¿Ves?- la corta Mimi-
hasta ahora sólo me has demostrado que sí es un chico frío…
-Pero luego…- Kari cerró
los ojos, dejando que los recuerdos fluyeran.
-¿Verdad que mi
hermano volverá?- pregunta la pequeña Kari, quien mira suplicante a Matt.
-Son muchos- Matt
desvía la mirada- Tai no podrá solo contra ellos…
En ese momento
lágrimas empezaron a fluir del rostro de Kari, en realidad temía por su
hermano, no podía describir la desesperación que sentía al no saber de él.
-Oye Matt, no creo que
sea bueno hacerla llorar- dice Gabumon mirando con tristeza a la niña.
Matt voltea la mirada
y ve a la pequeña, tan triste, tan indefensa y llorando… por su culpa.
Kari interrumpe su
llanto al observar un pañuelo frente a sus ojos.
-Ya no llores- dice
Matt arrodillándose a su lado- ya verás que todo estará bien… además, si le
ocurriera algo malo a Tai, yo estaré aquí para protegerte… ahora sólo cálmate,
pequeña K-chan…- dice abrazando tiernamente a la pequeña.
Poco a poco, el llanto
de la pequeña Kari fue cesando.
-Yamatto es la persona
más linda que hay en el mundo- dice sacando de su bolsillo un pañuelo blanco,
bordados con letras doradas las iniciales YI- aún conservo este pañuelo… porque
después de la batalla…
-¡¡Qué bueno que
derrotamos a los Dark Masters!!- sonríe Kari junto al grupo en el parque. Matt
está un poco alejado del grupo, tocando su armónica. Ella saca el pañuelo y se
acerca cuidadosamente al chico, se detiene a pocos pasos de él, y cierra los
ojos, escuchando completamente la melodía.
Matt se percata de la
presencia de la niña, y detiene su música.
-¿Ocurre algo?- dice
mirando a Kari.
-¿Yo? ¡No!- se
avergüenza un poco- ¡Es que tocas tan bonito! Aunque esa melodía es un poco
triste ¿no puedes tocar otra más alegre?
-Tal vez algún día…-
esquiva la infantil sonrisa de Kari.
-¡¡Por cierto!!- dice
mostrándole el pañuelo- ¡¡Con todo lo que pasó no pude devolverte esto!! Toma…
-Quédatelo- dice
devolviéndole el pañuelo.
-¡Pero es tuyo! Además
tiene tus iniciales bordadas en él…
-Cierto, mamá las
bordó para mí- suspira tristemente.
-¿Ves? Es importante
para ti…
-En serio Kari…
además, tómalo como un regalo de parte mía- sonríe- te lo di para que dejaras
de llorar, tómalo como un recordatorio de que no debes llorar, porque te ves
más bonita con una sonrisa en tu rostro…
-¡¡Gracias!!- dice
dándole un beso- ¡¡lo cuidaré mucho, te lo prometo!!
-Y esa es toda la
historia- suspira Kari.
-Oh, por Dios…- dice Mimi
mirando a Kari- ¡¡Lo amas!!
-¿Qué? ¿Cómo te… es decir
¿Cómo crees?
-Por Dios! La forma en
que dices su nombre… el brillo en tus ojos cuando lo mencionas… ¿Le quieres?-
dice Mimi.
-Mimi yo… yo no quiero…
es que a ti te gusta y…- a Kari se le enredaban las palabras.
-Cierto… lo quiero- dice
ella- y pelearé por él. Me valdré de todo lo que pueda, lucharé por su amor
hasta el final… pero tú también debes hacerlo. Al final es él quien tomará la
decisión. Y te doy un consejo: díselo.
Al pronunciar estas
palabras, Mimi se alejó de Kari.
***
-¡Matt!- se sorprende
Sora- ¿no estabas con Mimi?
-No lo creerías…-
suspira- se fue y me dejó solo en la heladería.
-¿Qué?- se extraña la
pelirroja.
-Tal y como lo oyes…
-¡Qué extraño! Y eso que
se va mañana a primera hora y dijo que quería pasarla contigo…
-Pues uno nunca deja de
conocer a las mujeres- sonríe.
-¡Oye!- se molesta Sora-
¿eso fue conmigo?
-No- sonríe- tú eres
diferente… eres especial.
-Por algo soy tu mejor
amiga ¿no es cierto?- sonríe ella.
Matt queda en silencio
contemplando por completo a Sora. La veía más hermosa que nunca, trató de
buscar en su corazón aquel sentimiento hacia Sora, ese sentimiento que lo había
hecho sufrir, pero, por más que buscó, no lo encontró. Entonces sonrió,
comprendiendo que sus heridas estaban sanas.
-Claro que lo eres- sonríe
dándole un abrazo- siempre lo serás.
-¡Matt!- Sora le devuelve
el abrazo- ¡¡pensé que jamás volveríamos a estar como antes!!
-Creo que ya todo eso
está olvidado ¿no?- sonríe- ahora vamos a buscar a Mimi porque ya me estoy
enfadando con ella.
Ambos siguen caminando,
mientras conversan animadamente. Sora se sentía feliz, hacía tiempo que tenía
ganas de volver a tener esa amistad con Matt. Esa amistad que los unía desde
hace mucho tiempo. Matt, por su parte sabía que a partir de ahora las cosas
volverían a ser como antes.
-¿Sabes?- Sora sonríe
pícara- Mimi me dijo lo que sentía por ti…
-¿?- el rostro de Matt
reflejaba total confusión.
-Momento…- Sora se
detiene en seco- ¿ella no te dijo nada? ¡Upss! Creo que ahora sí metí la pata…-
ella se lleva las manos a la cabeza y Matt no puede evitar sonreír.
-No sé por qué, pero yo
lo presentía… y ahora mis sospechas se corroboran…- sonríe el chico.
-¡¡NO le digas nada o soy
historia!!- sonríe ella también.
-No hay problema, después
de todo ella se irá mañana- suspira.
-¿Tú que sientes por
ella?- la curiosidad vence a Sora.
-Sora… tú más que nadie
sabes que Mimi es sólo una amiga… es como lo que tú sientes por mí. En realidad
sé lo que debe sentir ella, por eso quiero evitar hacerle falsas ilusiones…-
-Tienes razón- asiente
Sora- yo también lo lamento y…
-Ya no tienes que ofrecer
disculpas- sonríe- porque a final de cuentas tu “novio” es quien tuvo la
culpa.- dice en tono burlón.
-¿Tai?- dice ella un poco
confundida.
-Ahora que lo pienso,
creo que ser su novia te está convirtiendo en una indiscreta, porque recuerda
que fue él quien te dijo lo que sentía por ti… y ahora eres tú quien delata a
la pobre Mimi.- sonríe el chico.
Sora, viéndose en
evidencia, opta por cambiar el tema.
-Por cierto, te debo un
helado- sonríe ella al ver cerca la heladería- ¿qué dices?
-No tengo muchos fondos-
suspira- Mimi es muy glotona…
-Yo invito!- sonríe ella
tomándolo del brazo- ¡¡ahora disfrutaremos de un helado de chocolate!!
No muy lejos de allí,
Kari los observaba. Ella sonreía, porque podía darse cuenta de que los
sentimientos de Matt ya habían sanado y que ahora todo volvería a ser como
antes.
“Querido Diario:
Hoy ha sido un día un
poco loco. Me enteré de algunas cosillas que jamás quise descubrir. Como que
Takeru me quiere… pero como su novia. Yo creo que en el fondo lo sabía, pero me
negaba a admitirlo. ¡Qué cobarde fui! ¿no te parece? Bueno, el punto es que no
le he dado a entender que NO lo quiero como novio. Pero ya se lo diré, cuando
reúna valor.
Por otra parte,
descubrí que Mimi quiere a Matt. No me disgustó tanto, porque ella hará buena
lucha y lo sé, pero creo que me enseñó que debo decirle a Matt lo que siento
por él ^^ sé que algún día debo de decírselo, no puedo callar esto tanto
tiempo. Algún día creo que reuniré todo el valor necesario (que es bastante,
por cierto)
También me día cuenta
que Matt ya no gusta de Sora ¡Qué feliz me sentí!! No tanto por mí, sino porque
ahora ellos podrán seguir su amistad como siempre lo han hecho. Claro que
tendrán que soportar los celos de mi hermano, pero ni modo. ¿Te digo algo?
¡Realmente tengo que ver la cara de Tai cuando los vea juntos de nuevo! ¡¡Ahora
verá que a veces una amistad vale mucho más que un noviazgo!! Eso debo
aplicarlo a mi caso: trataré de ser una de las mejores amigas de Matt.J
Mañana iré a despedir
a Mimi al aeropuerto y le diré que tomé mi decisión: le diré a Matt lo que
siento, pero cuando lo considere necesario y que haré mi lucha. Pero mientras
tanto, en la privacidad de mi cuarto, seguiré escribiendo Y+K en mis cuadernos
y seguiré suspirando en la oscuridad: “Suki da yo, Yama-chan”
Beshos,
Kari”
FIN
Notas: “¿Ése
es el final?” se preguntarán. Pues les diré que sip… ese es el final. ¿Por qué?
Porque me encantan los finales alternativos, es decir que ustedes pueden pensar
lo que quieran de lo que pasó después: ¿Kari le dijo a Matt? ¿Con quién quedó
Matt? ¿Y Mimi se olvidó de Matt? ¿Sora y Tai siguieron su relación? en fin…
puede ser lo que quieran.
Por cierto,
para los que no sepan “Suki da yo” significa “me gustas” en japonés (ni modo
que en otro idioma). Iba a ponerle como título “Me Gustas” pero creí que se
oiría más bonito en japonés.
Okiss, este
fic va para Karen, diciéndole que se me perdió su e-mail y que por eso no he
podido responderle. Chica, si estás leyendo esto ¡¡escríbeme que no quiero
perder el contacto!!
No planeo
continuar con este fic, así se quedó, de modo que ni pregunten eso tampoco creo
querer escribir más de Digimon, al menos hasta un laaaaargo tiempo… demás
comentarios a maral15@yupimail.com
Marissa