CAPÍTULO XXIII: EL DESPERTAR DE REI(I)

 

 

 

 

            Misato se instaló en la habitación de Rei después de ver salir por la puerta a Shinji, se acomodó en el sillon quedando la puerta a su lado izquierdo por la parte que se abría; de esta manera si alguien abría la puerta no se encontraría con nadie y Misato estaría a sus espaldas.

 

            Pasaron las horas y Rei no parecía cobrar mejoría ninguna, todos los aparatos conectados a ella decían que estaba ante un cuerpo vegetal, no tenía alma, funcionaba como funciona un motor al ralentí pero al que falta el conductor.

 

            Eran más o menos las cinco de la mañana cuando la puerta se abrió con mucho sigilo. Misato yacía dormida sobre el sillón. Una sombra penetró en la habitación y tras cerciorarse de que Misato estaba dormida, se dirigió hacia Rei con mucha cautela. Se acercó a la cama, sacó un instrumento de su bolsillo...

 

 

            -¡ALTO!- gritó Misato mientras daba la luz de la habitación y apuntaba al sujeto con un arma.

 

            -¡Levanta las manos despacio y gírate!- ordenó -¡y no hagas ninguna tontería que me pongo muy nerviosa si me enfado-.

 

            El individuo se alzó de la cama y levantó las manos muy lentamente, se giró y se quedó mirando a Misato.

 

            -Muy bien, ahora ¡arroja lo que tienes en la mano y quítate el pasamontañas!-.

 

            El extraño arrojó el instrumento al suelo con la mano derecha y con la izquierda se quitó el pasamontañas.

 

            -¡RITSUKO! ¡¿se puede saber qué haces aquí y con esa pinta?!-.

 

            -Sólo quería ver a Rei para ver cómo estaba-.

 

            Misato seguía apuntando con su arma a Ritsuko -¡claro! y eso que llevabas en la mano ¿qué era? ¿la inyección de las cinco?-.

 

            -Es un analizador de la actividad de la corteza cerebral, mide la cantidad de impulsos nerviosos y los lugares en donde se produce dicha actividad-.

 

            Misato parecía sorprendida -de acuerdo, pero probémoslo primero contigo-.

 

            Ritsuko la miró con desconfianza, pero cogió el instrumento y se lo aplicó a sí misma -yo tengo alma, no me pasará nada...-. Encendió el dispositivo y este comenzó a zumbar. Al cabo de unos instantes se apagó sólo.

 

            -¡Ves! no hay nada que temer-.

 

            -¿Entonces por qué vienes a las cinco de la mañana, sin hacer ruido y a hurtadillas?-.

 

            -Lo primero porque tus guardias no me dejaron pasar antes, y lo segundo para no despertarte al verte durmiendo-.

 

            Misato bajó el arma despacio -está bien aplícaselo-.

 

            Ritsuko puso el "analizador" en la cabeza de Rei y lo encendió. El zumbido de antes se volvía por momentos más agudo y un espeso humo comenzó a salir de él -¡rápido!¡quítaselo de la cabeza!-.

 

            Misato le quitó el aparato que empezó a arder con un humo ocre y pegajoso.

 

            -¡Eso no es un analizador de actividad cerebral!- levantando su arma otra vez y quitándole el seguro -dame una buena razón para no volarte los sesos aquí mismo-.

 

            Ritsuko miró el arma y volvió a mirar a Misato -bien, te contaré todo lo que sé-.

 

            -Rei es un clon de la madre de Shinji y con el alma de Lilith, esta debería ser la segunda Rei, porque la primera apareció muerta al lado mi madre hace nueve años. Todo iba bien, pero alguien destruyó a las que teniamos de reserva; después del suicidio de la segunda no sabiamos qué hacer, pero apareció esta y pensamos que teníamos otra oportunidad, intentamos inculcarla el alma de Lilith, pero su cuerpo ya estaba ocupado. De momento hemos fracasado en todos nuestro intentos...-.

 

            -Bien, sigue- sin bajar la pistola.

 

            -...Al acabar la batalla con el último Ángel y con los índices de contaminación mental que registramos, pensamos que su cuerpo estaba desposeído, y yo era la encargada de instalar los patrones del alma de Lilith en su cuerpo-.

 

            -Entonces, ¿qué ha ocurrido?-.

 

            -Cuando un cuerpo tiene ya un alma, este "instalador" se queda inactivo como pudiste ver. Pero el cuerpo de Rei no tiene un alma, si no que tiene dos almas, la propia suya y el alma de Lilith, por lo que al intentar inculcar otra el "instalador" ha tenido un cortocircuito-.

 

            -Si tiene dos almas, ¿por qué está en ese estado?-.

 

            -Está en ese estado porque ninguna de las dos almas tiene la voluntad suficiente para querer salir al exterior, están luchando entre sí, escondidas y seguras en el interior...-.

 

            Misato bajó su arma y se la guardó -doctora Akagi, será mejor que vuelva a su puesto en el cuartel general de NERV, por lo que a mí respecta, tendré un trato para con usted puramente y estrictamente profesional- la indicó con la mayor amargura que era capaz de expresar su voz.

 

            Ritsuko se dirigió hacia la puerta y cuando estaba a punto de salir -no se acerque a los chicos, y si les ocurre algún "accidente" puede darse por "eliminada" del proyecto por causa ajenas a su voluntad- oyó.

 

            Misato se giró hacia Rei cuando la puerta se cerró -Lucha Rei, tienes que salir adelante cueste lo que cueste, hay mucha gente esperando tu regreso-.

 

            Al venir el relevo, Misato les pidió que no dejeran entrar ni siquiera a los médicos -si les piden explicaciones, digánles que se dirigan a la mayor Misato Katsuragi-.

 

            -¡A la orden!-.

 

            Salió del hospital en dirección al cuartel general de NERV -debó conseguir hablar con Kaji, él me ayudará a salir de este atoyadero-.

 

            Llegó a las instalaciones y preguntó por Kaji -está reunido con el comandante Ikari- la informaron en su departamento.

 

            -Gracias, ¿sería tan amable de dejarle este mensaje?- al tiempo que extendía un sobre cerrado.

 

            -No faltaría más-.

 

            Después de una jornada rutinaria de trabajo, recibió un mensaje en su teléfono móvil -reúnete con nosotros en tu piso, soy Asuka-.

 

            Se dirigió a su apartamento al salir del trabajo, subió las escaleras y al entrar vio a Shinji y Asuka que la esperaban.

 

            -¡Hola chicos!-.

 

            Shinji le hizo un gesto de silencio y en un papel escribió -no hables, nos escuchan, mejor vamonos al parque- seguidamente habló en voz alta -¡Hola Misato! te veo un poco pálida, ¿por qué no vamos al parque?, el aire fresco te vendrá bien-.

 

            -Sí, creo que tienes razón, no he salido mucho últimamente- guiñando un ojo -¡os invito a un helado!-.

 

            Se acercaron al parque y se sentaron en un banco cerca del puesto de los helados. Miraron por los alrededores sin ver a nadie -hablemos ahora-.

 

            -Misato, hemos encontrado una forma de volver a nuestro mundo, aunque nos falta concretar algunos detalles- explicó Asuka con nerviosismo -Toji está haciendo un gran trabajo con el CD que encontraste y dentro de poco podremos irnos los cuatro a nuestras casas...-.

 

            -Me temo que no- la cortó secamente Misato.

 

            -¿Por qué?-.

 

            -Rei- empezó a decir Misato -no creo que pueda ir...-.

 

            Misato les contó parte de lo que Ritsuko le había confesado -...es por eso que no puede volver, parece que está en una batalla contra otra alma, ella puede vencer y volver si de verdad quiere hacerlo, si hubiera algo que la obligara a volver...- callándose la parte en la que Ritsuko intentó inculcar otra alma al cuerpo de Rei. Los chicos se miraron a la vez, no podían creer lo que estaban oyendo.

 

            -¿Y para cuándo era esa vuelta?- les preguntó Misato cambiando de tema.

 

            -La teniamos prevista hacia tres semanas, más o menos- respondieron los chicos afectados verdaderamente por la noticia de Rei.

 

            -Un momento, ¿pensabais iros dejando este mundo indefenso frente al ataque de los Ángeles?-.

 

            -No, Toji encontró un archivo de conexión a traves de internet con NERV, nos metimos dentro y lo descubrimos allí- dijó sin pensar Shinji -es así como descubrimos que existe un quinto elegido...-.

 

            Misato estaba estupefacta -un quinto elegido- no se lo habían comunicado antes, pero siendo así, el problema de la defensa de la Tierra estaba zanjado.

 

            -Chicos, debemos hacer planes, tenemos que trasladar a Rei a un lugar seguro- señalando a Shinji -tú tendrás que dejar de ir al instituto para cuidar a Rei por las mañanas, tú Asuka la cuidarás por las tardes...-.

 

            -Misato- interrumpió Asuka -¿y cuando vayamos a las pruebas de sincronización? allí debemos ir los tres-.

 

            -Tienes razón, y no quiero enseñar el as de Toji que tengo bajo la manga, debemos encontrar una solución-.

 

            Los tres pensaban en una solución cuando se fijaron en una canguro que paseaba a un niño por el parque.

 

            -¡Ya lo tengo!- exclamó Asuka.

 

            -¿Qué es?¿qué es?- dijeron al unísono Misato y Shinji.

 

            -Esto va a ser muy divertido...- pensó Asuka con una sonrisa maliciosa en la cara.

 

 

 

 

 

CONTINUARÁ.................................................................................................