CAPÍTULO X: EL PRIMER DÍA DE CLASE

 

 

 

            El lunes por la mañana estaba comenzando un día de lo más ajetreado. Todos querían usar el cuarto de baño al mismo tiempo.

 

            -Vamos Asuka, no puedo aguantar más...- suplicaba Shinji.

 

            -Date prisa, me tengo que peinar...- se quejaba Rei.

 

            Toji se cansó de esperar, así que entró en la cocina y en el fregadero empezó a lavarse la cara y peinarse.

 

            -¿Veís?, yo ya estoy listo, no teneis que esperar, podeis usar también la pila para asearos- les dijo mientras aparecía un fondo de una isla con un volcán, un mar embravecido y el sol ocultándose detrás de una nube.

 

            -Sí, pero a mí no me vale- saltaba de pierna en pierna con una catarata en los ojos Shinji.

 

            El volcán del fondo dió una falsa explosión, el mar se retiró y el sol se cayó.

 

            -No te preocupes, a mí sí me has ayudado- acercando su mano, Rei, a la mano de Toji.

 

            Toji apartó la mano con brusquedad dándola la espalda y dirgiéndose al cuarto de baño.

 

            -¿Qué le habré hecho para que me rehuya de ese modo?- se preguntaba Rei al seguirle con los ojos -no lo entiendo- bajando la mirada.

 

            -Hola Kaji, ¿cómo has venido tan pronto?- habló Toji en voz alta cerca del cuarto de baño.

 

            -¿Kaji? ¿dónde está?- abrió bruscamente la puerta Asuka y dirigiéndose al comedor.

 

            -Aprovecha, una vez que estés dentro serás el amo- empujando a Shinji hacia el cuarto de baño.

 

            -¡Toji!, eres un tonto al igual que Shinji, Kaji no ha venido- mientras se dirigia al baño. Se encontró la puerta cerrada y con las manos en jarras -¡Shinji! sal inmediatamente que necesito entrar-

 

            -¡Aaaaaaaaahhhh!- con un sonido de agua correr -chincha rabiña, que tengo una piña, que tiene piñones y tú no los comes-.

 

            Dentro de lo malo, los cuatro salieron de casa con tiempo. Iban caminando y charlando normalmente, Shinji y Asuka discutiendo sobre lo que iban a comer, puesto que no habían traído la comida, y Rei y Toji hablando sobre las materias que se darán en clase.

 

            Mientras Rei hablaba sobre cómo sería la historia de este mundo con una sonrisa en la boca y acercándose a Toji, este por el rabillo del ojo comrobó que una persona les estaba siguiendo. Miró la cara sonriente de Rei y se detuvo.

 

            Los tres chicos se pararon también -¿qué te pasa Toji? ¿por qué te paras?- le preguntó Rei acercándose a él.

 

            -¡No te importa!- gritó Toji -y dejame en paz, no haces más que agobiarme...-

 

            Rei se quedó pálida por la contestación -perdoname Toji, no sabía que te molestara tanto, no volveré a acercarme a ti- girándose y comenzando a caminar con la cabeza baja hacía la escuela-.

 

            -¿Qué te pasa Toji? ¿se puede saber?- preguntó Shinji acercándose a él con los puños cerrados y preparándose para una pelea (en su mundo se le daban bastante bien).

 

            -Ahora no os lo puedo decir- mirando fijamente hacía donde unos segundos antes estaba el individuo que los seguía -pero creeme, esto es lo mejor para ella- y hecho a correr hacia el instituto por otra calle.

 

            Asuka y Shinji se quedaron plantados en medio de la calle con cara de embobados sin saber que pensar -¡Se nos hace tarde!- exclamó de repente Asuka y salieron corriendo por el camino que había seguido Rei -tú tienes la culpa, kinder, si no te pusieras a hablar sin pensar...-

 

            La primera en llegar a clase fue Rei, llegó cabizbaja y con los ánimos por el suelo; además en clase nadie la saludó ni se interesó por ella después de lo ocurrido en el atentado. Se sentó en un pupitre cerca de la ventana y se quedo absorta en el paisaje.

 

            El segundo en llegar fue Toji, que también llego un poco confundido por lo pasado anteriormente, pero no le dió demasiado tiempo a pensar en ello por que oyó una voz a sus espaldas -¡Tú! ¿no estabas en Alemania? que alegría verte- al tiempo que se acercaba una persona que a Toji le resultaba familiar.

 

            -¿Eres tú Hikari?- preguntó viéndola acercarse.

 

            -¿Quién te crees si no?- inquirió la chica con cierto enfado -parece que olvidaste todas las veces que fuí a visitarte al hospital, ¡desagradecido!, pero ya me las pagarás...- con una sonrisita muy sospechosa.

 

            Toji tragó saliva y miró de reojo a Rei que contemplaba la escena con ojos tristes.

 

            -Disculpa debo ir al baño- recordando la advertencia de Misato sobre mostrar los sentimientos e intentando que la voz no le temblase.

 

            Llegaron Shinji y Asuka casi sin tiempo, por lo que Hikari les reprendió -se puede saber por qué llegaron tan tarde, debería decírselo al proferso para que los castigara-.

 

            -Oye Asuka, en nuestro mundo Hirkari era una viva la vida y tenía el sentido comunitario que un cangrejo ermitaño- le comentó Shinji cuando se sentaron en sus sitios. -Tienes razón, además fíjate como mira a Toji- contestó Asuka.

 

            Las clases transcurrieron sin ningún incidente hasta que llegó la clase de gimnasia; Rei seguía con la mirada a Toji, cosa que se percató Hikari.

 

            -¿Qué es lo que miras tan fijamente?- preguntó inquisidoramente Hikari enfretándose a Rei -tú nunca te has fijado en los chicos-.

 

            -Es que parece que no se encuentra bien- disimuló Rei.

 

            -Tendré que estar atenta a lo que pueda pasar- pensó hikari -esta no es la Rei que conocí-.

 

               

 

CONTINUARÁ..............................................................................................................................