CAPÍTULO VII:¡QUE DÍA TAN BELLO!

 

 

            En el apartamento de Misato todo estaba en completa calma menos los ronquidos de Toji (el alcohol tiene esos efectos, lo sé muy bien).

 

            Los cuartos se los repartieron de forma aleatoria, Toji, el primero en caer, fue al cuarto de Shinji; Shinji y Rei dormían en el cuarto de baño y Asuka y Misato juntas en el cuarto de esta última.

 

            Eran alrededor de las 3 de la mañana cuando Asuka se desveló por la sed que tenía, había llorado mucho, así que decidió levantarse a por un vaso de agua. Al salir de la habitación encontró luz en el comedor, al acercarse vió a Shinji sentado observando dos  fotografías; en una de ellas estaba en el parque de atracciones con su padre comiendo un helado gigantesco mientras su padre se reía. La otra era de un día de campo con su madre y Rei meses después de morir el padre de ella, estaban las dos sonrientes, sentadas en la hierba, por detrás, Shinji abrazaba a Rei y se miraban a los ojos, pareciera a los extraños que fueran novios.

 

            La puerta en ese momento se corrió un poco, Shinji levantó la vista y vió a Asuka; esta se empezó a retirar pero...

 

            -Asuka espera un momento, quiero hablar contigo, por favor-.

 

            -Si lo que quieres es insultarme y hacer que me sienta mal, no hace falta, ya estoy muy dolida con lo que me dijiste antes- sentándose en la silla de todos modos.

 

            -No, no quiero volver a decir esas cosas horribles que te dije- se avergonzó Shinji -es sólo que el saber que hay una gran posibilidad de no volver a ver a mi madre, y poder ver a mi padre, pero como si fuera un extraño...- comenzó a llorar -algo dentro de mi se rompió... Por favor Asuka perdóname, lo último que haría en esta vida sería herirte o dejar que te hieran-.

 

            Asuka miró por un momento al muchacho y vió la gran carga de responsabilidad que tenía sobre los hombros. Se acercó al muchacho que lloraba sin consuelo tímidamente y le pasó un brazo por los hombros.

 

            -Venga, venga, todo se arreglará, encontraremos la forma-.

 

            Sin pensarlo, Shinji se abrazó a Asuka y empezó a calmarse poco a poco.

 

            -Gracias Asuka- limpiándose las lágrimas -siempre me ha tocado ser a mí el que consuela-.

 

            Entonces se dieron cuenta de que estaban abrazados, así que se miraron a los ojos. Asuka estuvo a punto de decir algo pero Shinji le puso un dedo en los labios -Rei es mi hermana, pero tú eres...-.

 

            -¡UUUUAAAAAAAAAAAAAAH!- bostezo Toji con la boca pastosa abriendo la puerta -sabéis donde está la cocina, tengo una sed...- y al fijarse mejor le cae la mandíbula inferior al suelo -pero que haceis así abrazados, Asuka en camisón y Shinji con los calzoncillos-.

 

            -¡¡¡¡¡PERVERTIDO!!!!- y PLAAFF, una señora bofetada capaz de derribar un Ángel con escudo A.T. incluido.

 

            -¿Qué pasa?, ¿qué pasa?- saliendo Rei del baño y Misato de la habitación somnolientas.

 

            -Me... me... pa... parece... que... he... hemos... vuelto... a... la... normalidad- desmayándose Shinji con la mejilla marcada.

 

            Al día siguiente todos se levantaron bastante tarde, Misato les dejó su especialidad "Tallarines instantaneos con sabor a curry y salsa de curry concentrada". Cuando los chicos leyeron la nota, perfirieron no probarlos por si acaso.

 

            A Rei se le ocurrió la idea de limpiar la casa, ya que tendrían que vivir de momento allí, no quería vivir en una pocilga -a mi me gusta el aire limpio y la luz, las pocilgas para las cucarachas-.

 

            -Me estás llamando acaso cucaracha- finjiendo Shinji enfadarse.

 

            -Claro que sí kinder, eres el ser más sucio e inútil para la limpieza que conozco- respondió Asuka amenazándole con un dedo.

 

            A lo que Toji añadió -o sí claro, habló Mr Propper-.

 

            Se miraron las caras y soltaron unas grandes carcajadas.

 

            En la sede central de NERV, Gendo mantenía una reunión con el consejo de Seele.

 

            -Sabe comandante Ikari que todavía faltan cuatro Ángeles-.

 

            -Lo sé, estaremos preparados para su ataque-.

 

            -Estamos gastando una gran cantidad de recursos en sus "juguetitos" y queremos ver resultados-.

 

            -Los verán, no se preocupen-.

 

            -¿Cómo la idea estúpida de juntar a todos lo elegidos en un instituto?, no estoy muy convencido de que fuera un atentado sin idea- la voz del consejero se relajo -al menos nos queda un piloto todavía de reserva-.

 

            -Sí, es verdad, todavía lo estamos entrenando en Europa, cuando seá la hora ya le avisaremos-.

 

            -Sin nigún problema- contesto Gendo a los consejeros -se hará como está planeado-.

 

            -Está bien, pues fuera conexión-.

 

            -Fuera conexión-.

 

            Mientras se oía como cerraban los circuitos de comunicación los demás consejeros, el comandante Gendo Ikari seguía pensando con la mirada perdida en el infinito -se hará como está planeado-.

 

            Dentro de Melchor, la doctora Ritsuko está comprobando las conexiones del superordenador Magi. Ayundándola está Maya que le iba dando los resultados.

 

            -Dame los resultados del límite de tolerancia- pidió Ritsuko.

 

            -Estan dentro de los límites del vector C-23, 45º de desvío en referencia del eje Z- confirmó Maya revisando su ordenador portátil.

 

            -Hola doctora Frankestein- sonó una voz a su espalda -buenos días-.

 

            -Hola Misato, parece que hoy has venido muy contenta- dice con una cara extrañada -ayer estabas muy decaída, pero parece que hoy te has levantado de buen humor, ¿me puedes explicar ese misterioso cambio?-.

 

            -Te lo contaré después del trabajo,¿qué tal si vienes a cenar esta noche a mi casa?-.

 

            -De acuerdo, pero no pienso llevar nada de comer, lo tendrás que hacer sola-.

 

            Con una enorme gota corriéndola por el pelo -¿estará pensando que soy mala ama de casa?- piensó -si, si, por mi está bien, por cierto, debo irme ahora, ¿dónde está el comandante Ikari?-.

 

            -Se encuentra reunido con Fuyutsuki- le aclaró Ritsuko.

 

            -Que pena, en fin, ¿me podrías disculpar con él?, tengo hoy una agenda muy apretada y necesito un día libre ¿eh?- suplicó casi tocando el suelo con la cabeza.

 

            -Vale, vale, pero ya me debes dos invitaciones-.

 

            En el despacho de Gendo, este habla con Fuyutsuki sobre el tema de la falta de pilotos; aunque más que hablar es un monólogo de este último con algunas interrupciones de Gendo.

 

            -No podemos permitir que Seele nos mande pilotos, estaríamos en sus manos-.

 

            -Ya queda poco para terminar con el plan de la instrumentalización humana, este hecho solamente lo ha acelerado un poco- habla Gendo como si fueran pensamientos dedicados a su persona.

 

            -Pero si el siguiente Ángel ataca ahora, todo será en vano, se producirá el Tercer Impacto. Lo mejor será que busquemos pilotos por nuestra cuenta...-.

 

            -¡NO!... mejor dejemos que Seele nos traiga su piloto, y por los Ángeles, no se preocupe, le garantizo que no atacarán-.

 

            Alzando casí imperceptiblemente una ceja -¿cómo puede saber que los Ángeles no atacarán?,¿Ni siquiera se ha inmutado por la muerte de su hijo ni por la destrucción de todos los clones de Rei? aquí pasa algo que no entiendo- pensó en ese momento.

 

            En el piso de Misato mientras.

 

            Los chicos se habían repartido el trabajo, Asuka y Shinji se ocuparían de la cocina y el comedor. Shinji puso cara de felicidad al pensar que no tendrían mucho trabajo; ya que Misato era una mala cocinera y casí todo era comida de lata. Al entrar en la cocina el primero con su gran sonrisa de repente el mundo se le cayó encima y su cara se quedó azul. Claro que cocinaba muy poco, pero jamás fregaba, y el piso al ser pequeño no tenía sitio para un lavavajillas.

 

            A Rei y Toji les tocó limpiar el cuarto de baño y la habitación de Misato (las habitaciones de la Asuka y Shinji de ese mundo estaban "más o menos" ordenadas) y Rei pensó que como Toji estaba con el brazo en cabestrillo y no podía hacer esfuerzos, lo mejor sería que recogiera la ropa desperdigada; al cabo de dos horas sólo había recogido dos pañuelos y al preguntarle el motivo, señalo con la cabeza gacha y rojo de vergüenza una montaña de ropa interior femenina mezcla de sucia y limpia.

 

            Después de cuatro horas de duro trabajo, Asuka salió de la cocina para descansar un rato con un refresco acompañada por Shinji, ambos cansados pero de buen humor.

 

            -No sabía que tuvieras esa maña fregando los cacharros- le sonrió Asuka.

 

            -Ya, pero cuando en casa solamente hay hombres- sacando pecho -hay que aprender lo que haga falta-.

 

            Ambos se rieron con ganas, entonces por es rabillo del ojo vió unas huellas en la moqueta, estas huellas estaban húmedas todavía.

 

            -Oye Shinji, ¿tú crees que Rei y Toji...?- señalando el baño.

 

            -No creo, es mi hermana y estando nosotros aquí tan cerca...- se defendió Shinji.

 

            -Acuerdate de ayer por la noche- se sonrojó Asuka.

 

            Shinji por fin dió su brazo a torcer, y con mucho cuidado se acercaron a la puerta del baño, escucharon con cuidado, abrieron la puerta y...

 

            -¡¡¡GGRRRREEEEEEKKKKKK!!!!- graznó Pen-Pen.

 

            Los chicos gritaron como dos posesos y salieron corriendo por toda la casa hasta que Rei y Toji salieron de la habitación de Misato donde ordenaban la bragas, sostenes, picardías y demás cuando también vieron a Pen-Pen. Como es de suponer también gritaron y comenzaron a correr alrededor de la mesa con el pingüino detrás. Cuando saltaron encima de la mesa Rei observó -Vaya Toji, parece que tu hombro ya está curado-.

 

            -¿Por qué lo dices?-.

 

            -Porque me tienes agarrada por la cintura con el brazo malo- con una sorisita maliciosa.

 

            -Eh... esto... era para salvarte de esa feroz criatura-.

 

            -Sí, sí, tan feroz que sólo come pescado si está muerto y bien muerto- oyeron a sus espaldas -hola, Pen-Pen ¿has dormido bien?-

 

 

 

 

 

 

 

 

CONTINUARÁ...................................................................................................................