FELIZ NAVIDAD.
Por: Priss.
CAPITULO 3. Así
es tu vida en la Luna Fantasma.
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Buenos días, como...oye vamos dormilón
despierta ya...Van?, Van!!.
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mmmm
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Vamos despierta tengo planeado que demos un paseo por la ciudad para que
conozcas mi país, anda solos tu y yo.
Kanzaki
hace que Van se levante con mucho esfuerzo y una hora después ambos comienzan
un recorrido por la gran ciudad.
~
Oye Hitomi, ¿Por qué hay nieve en esta Cd.?, dime.
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Es invierno, en esta época del año gran parte del mundo esta cubierto de
nieve...¿Por que te impresiona?.
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La única parte de Gaea que es cubierta por la nieve es Asgard, ningún otro
lugar del planeta se ve así.
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A ya veo. Dime ¿Tienes frío?.
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No...gracias a esta chamarra, fue muy amable por parte de tu padre prestármela.
~
Si pero necesitas más de estas, ven vamos al centro comercial para comprarte
ropa de acuerdo a Japón.
~
Hay no es necesario que...Hitomi!!.
La
chica hace caso omiso de lo que le dice su novio y literalmente lo arrastra
hasta un centro comercial. Por primera vez en su vida Slanzar experimenta lo
que era la vida en una ciudad de la tierra y peor aun, con una chica
recorriendo absolutamente todas las tiendas del lugar.
~
¿Podemos descansar?, por favor.
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Van esto no puede ser tan malo.
~
Es demasiada actividad para alguien que esta acostumbrado a vivir una vida
tranquila como yo, además estar rodeado de tanta gente es estresante y, hay
demasiado ruido por doquier.
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Tal vez, pero estamos juntos. No creas que es muy agradable estar rodeada de
tantas personas, pero es el planeta donde nací y crecí, creo que por eso me
gusta todo esto. Una tienda más ¿Si?.
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Hay esta bien.
Mientras
Hitomi visitaba una última tienda, Van comenzó a husmear sin buscar algo en
especial, se fijo en un local bastante peculiar. Al entrar ahí una chica le
preguntó si buscaba algo en particular a lo que Slanzar puso una cara de “no
entiendo”. Poco después Hitomi entro al local buscando a Van.
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Van!!...pensé que te habías perdido, no vuelvas a hacerlo por que ¿Donde
demonios te encontraría?.
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Hitomi yo.
Van
sonrió al ver a su chica. “Buenos días señorita, supongo que usted es la novia
de este caballero, me pregunto si el joven quisiera ver una sortija para
obsequiársela y formalizar su compromiso”. Dijo la chica del local, ante esto
Kanzaki se sonrojo a más no poder y van solo puso cara de “De que hablan” ya
que no entendía nada. Hitomi le dijo a la chica que se equivocaba y saco de ahí
a Van lo más rápido que pudo.
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¿A que se refería esa mujer?.
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A nada en especial no lo entenderías.
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Entonces explícame; en este lugar tienen costumbres muy extrañas.
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En otra ocasión si.
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Como gustes. A propósito quería preguntarte por que están esas extrañas luces
por todas partes, a donde quiera que vamos las cosas están cubiertas por luces
y lazos verdes, hasta los castillos.
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Hay Van no son castillos son edificios y las luces son el adorno que se coloca
por doquier pues es Navidad.
~
¿Navidad?.
~
Si.
La
pareja se detuvo en un parque; estaba vacío no había absolutamente nadie, solo
ellos. Kanzaki guió a Slanzar hasta unos columpios y ahí se sentaron.
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Hitomi...dime, ¿Qué es Navidad?.
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Veras, es cuando celebramos el nacimiento de Jesucristo. Cada año se celebra,
más que nada es como si se reforzara la fe y esperanza, amor y buenos deseos.
Solo es dar no recibir. ¿Me entiendes?.
~
mmm creo que si, y ¿Quién es Jesucristo?.
~
Ese es un tema mmmuyyyyyyy largo, ya te lo explicaré después.
La
pareja intercambió miradas y justo cuando iban a unir sus labios un copo de
nieve se interpuso entre sus rostros y de este siguieron más. Esto se convirtió
en una escena llena de ternura; Van se acercó a su niña y conforme sus rostros
se acercaban más y más, ambos se habían sonrojado, finalmente sus labios se unieron.
Un beso largo y tranquilo como si trataran de compensar con este los muchos que
no se dieron; al separarse sus rostros quedaron a escasos centímetros así
podían sentir el aliento del otro.
Hitomi
trato de disimular su nerviosismo por la situación y miro su reloj...
~
Santo dios, este día ya ve a llegar a su fin, nunca antes sentí que el tiempo
transcurriera tan rápido.
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Con migo el tiempo vuela, no es así?.
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Así parece, además debemos irnos le prometí a Yukari que cenaríamos con ella y
el superior.
~
Yukari?, ¿Superior?, ¿Quienes son?.
~
Yukari es mi mejor amiga, le he hablado de ti y se muere por conocerte claro
que no le he dicho que vienes de otro planeta ni nada de eso. Y el superior es
su novio, también es amigo mío.
~
Pues si son amigos tuyos deben ser buenas personas, me gusta la idea de
conocerlos.
~
Entonces tomaremos un taxi, dejaremos todas estas cosas en la casa y después
nos cambiaremos de ropa, ellos pasaran por nosotros.
Dicho
esto Kanzaki detuvo un taxi. La pareja lo abordó aunque Van no muy convencido
de hacerlo; para él esos extraños “guymelefs” no eran muy... de su agrado.
Al
cabo de una hora y media los jóvenes ya estaban listos; Hitomi vestía un suéter
rosa el cual llegaba hasta poco más arriba de su ombligo y una falda color
blanco, larga y ajustada; mientras Slanzar...bueno el pobre fue obligado a
ponerse un traje de color blanco, bueno su novia lo compro especialmente para
el así que no le quedo de otra.
Su
espera terminó y Yukari llegó junto con Amano para recoger a su amiga y llevar
a Van a una cena en el planeta tierra.
Durante
el recorrido en el auto de Susumu, quien obviamente iba conduciendo, tanto el
como Yukari le hacían infinidad de preguntas a Van. “¿Cómo conociste a
Hitomi?”, “¿Cómo hiciste para que te hiciera caso?”, ¿Qué es lo que más te
gusta de ella?”...etc, etc. Y tantas preguntas no eran para menos después de
todo prácticamente solo sabían su nombre y deseaban conocer más a cerca del
hombre que se ganó la simpatía de Hitomi, el hombre que era todo un misterio.
El
interrogatorio se prolongo hasta poco después de que terminaran de cenar en el
retaurant al que Susumu acostumbraba llevar a Yukari y, a pesar de tantas
preguntas, Fanel no pronunció palabra alguna durante toda la noche demostrando
que sabía bien como controlarse en situaciones un tanto desesperantes, aunque
por dentro estaba deseando que la noche terminará, ante la idea de que iba a
responder y tendía que hacerlo en algún momento.
Hitomi
como siempre al rescate; cambió el tema de conversación por anécdotas de cuando
asistían a su antiguo colegio. Fue ahí donde se conocieron y se hicieron
amigos; los recuerdos hacían reír y expresarse feliz a Kanzaki, expresiones que
llamaron la atención de Van Fanel, ya que él pocas veces había visto así de feliz
a su destino pero no tanto como en ese momento. Ahí fue cuando Slanzar se dio
cuenta de que Hitomi solo era feliz si estaba en su planeta, si regresaba a
Gaea seguramente viviría con tristeza eterna y el no era capaz de opacar tal
felicidad. Además también acepto que aunque la luna fantasma era un planeta
hermoso, lleno de cosas nuevas y extrañas que el quería descubrir, no podía
quedarse a vivir en ese planeta, a el le hacía mucha falta Gaea, ya extrañaba
su hogar.
~
Es verdad...para que ambos seamos realmente felices, tendremos que
alejarnos...otra vez.
Pensaba
Van mientras sus ojos se clavaban en Hitomi y la noche seguía transcurriendo
sin que Slanzar dijera una sola palabra...por discreción, por tristeza, quizá
resignación o por que no tenía idea de lo que los demás hablaban, pero esa
noche cuando Fanel comprendió por que Hitomi no se quedo con el aquella vez,
fue la más deprimente de su existencia.
Y
hasta aquí llegó el tercer capitulo, no avance mucho en la trama pero me gusto
como quedó.
Criticas,
aclaraciones, etc, etc.... a: priss_pk@hotmail.com
Disculpen,
tengo tantas cuentas de correo que las tengo regadas y las cambió
constantemente pero este y el de Ishida son los meros, meros.