Luna Oscura.

Por: Raquel Cervantes.

La Luna llena se deja ver por toda la ciudad, las estrellas la acompañan y la noche se envuelve en un ambiente mágico. La vida nocturna prosigue al compás del firmamento.

Pero para él la vida nocturna no tiene significado, simplemente sigue durmiendo. Había tenido un día muy pesado en la escuela, a decir verdad toda la semana; de modo que hoy viernes lo que más tenía era sueño. Así que ahora duerme plácidamente, entre sueños esboza una sonrisa; al parecer su sueño le agrada.

Sin embargo, el silencio que hay en su habitación se rompe. Alguien le llama.

-Wallace… Wallace…

El chico abre los ojos lentamente. Mira a su alrededor y comprueba que no hay nadie, por lo que debió ser su imaginación, o tal vez no distinguió un sueño de la realidad. De modo que intenta volver a dormir, pero de nuevo la voz le llama.

-Wallace… Wallace…

El chico se sienta de un brinco en la cama, está seguro de que lo escuchó. Mira otra vez por toda la habitación y comprueba de nuevo que no hay nadie.

-Wallace…

-¿Mamá? ¿Eres tú?- pregunta con un poco de miedo.

-No…- dice la voz que cada vez se escucha más cerca- no soy tu madre…

-¿Entonces quién eres?- el chico cada vez tiene menos temor, presiente que la extraña voz no va a hacerle daño.

-Alguien que necesita de tu ayuda…- se puede distinguir que la voz es femenina.

-¿Mi ayuda? No entiendo…

-Sabes a lo que me refiero…

Un sudor frío recorrió la frente del chico, temía que se refiriera al…

-…al Digimundo…- la extraña voz confirmó sus sospechas, al escuchar esto una extraña sensación recorrió su espina dorsal. Inmediatamente se puso de pie.

-¿Cómo sabes del Digimundo?

-Es una pregunta muy sencilla- la voz pareció reírse- pues porque yo soy parte de él…

-¿Qué?- el chico cada vez entiende menos- ¿quién eres? ¡¡Preséntate!!

-Está bien… pero no grites tanto…

Al decir esto, una pequeña lucecita plateada apareció de la nada. Poco a poco la luz se fue haciendo más grande, cuando estuvo más o menos del tamaño de Wallace, fue tomando forma humana. Específicamente, la forma de una chica. Cuando la forma de la chica estuvo lista, ésta cobró vida.

-Hola Wallace- saludó con una sonrisa.

-¿Quién eres?- dice acercándose con cautela. La chica le sonrió, tenía el cabello negro y los ojos eran de un color verde esmeralda.

-No te preocupes, no vengo a hacerte daño. Como dije antes, he venido en tu ayuda ¿sabes?

-Acerca del Digimundo ¿cierto?- preguntó. La chica asintió.

-Mi nombre es Luna- dice extendiendo su mano hacia él en señal de amistad- mucho gusto…

EL chico tomó su mano y la estrechó con la suya.

-Wallace, lamentablemente mi visita no es de placer. Hay problemas… y muy serios si no nos apuramos…

-¿Qué ocurre en el Digimundo?-

La chica dibuja un círculo en el aire y se forma un portal. Toma de la mano a Wallace.

-Vamos al Digimundo y allí te explicaré ¿de acuerdo?- Wallace asiente.

Una luz plateada los envuelve y en poco segundos son transportados al Digimundo, exactamente en la Ciudad del Inicio.

-Vaya- dice Wallace mirando con detenimiento a su alrededor- la Ciudad del Inicio…

-No es el momento de admirar- dice Luna- las cosas no estarán bien si no actuamos rápido.

-¿Qué es lo que ocurre?

-Verás, hace unos días descubrimos una extraña fuerza. No sabíamos si era maligna, pero de lo que estábamos seguros era de que era muy poderosa… recién ayer descubrí que, para mala suerte de todos, sí era maligna. Pero no sólo eso, sino que se comportaba de manera muy extraña…

-¿De qué forma?- a Wallace no le gustaba el rumbo que tomaban las cosas.

-La verdad no sabría explicarlo, pero esta fuerza no ataca a los Digimon directamente, los destruye de una manera más sutil, pero a la vez efectiva: destruye su base de datos…

-¿Qué?- Wallace no daba crédito a lo que oía.

-La ventaja es que gasta mucha energía cuando lo hace y tiene que reponerse, lo que le toma algo de tiempo, ahora está recuperando energías… de otro modo no estarías aquí…

-Bueno, pero si todo esto sigue así, si nadie hace nada para impedirlo…

-EL Digimundo desaparecerá…-termina Luna.

-¡¡Pues vamos a traer a los demás elegidos!!-

-¡¡No!!- se exalta Luna- no podemos… ¿por qué crees que te he traído a ti solamente cuando podía traer a los demás? Pues porque ahora mismo la base de datos del Digimundo está inestable, y si cometo la imprudencia de traerlos a todos al mismo tiempo podrían borrar su base de datos del sistema automáticamente…

-Entiendo- dice sentándose en el piso- pero… ¿y los Digimon?

-¿Te refieres a sus Digimon?- sonríe la chica- no te preocupes… yo también temía por ellos, de modo que creé una barrera contra la energía, ahora están descansando…- Luna se percató de la preocupación de Wallace por su Digimon-… no te preocupes, Terriermon está bien.

-Bueno- suspira aliviado- lo mejor ahora será encontrar la forma de traer a Davis, Yolei, Cody…

-También a Izzy, Taichi, Joe…

-Pero ellos ya no soy elegidos- dice el chico- ¿acaso no lo sabías?

-Lo sé, pero ellos serán necesarios.

-¿Cómo lo sabes?

-Porque ellos tienen más experiencia, deben enseñarles a los nuevos… porque en caso de que los emblemas desaparezcan…-

-¡¡No pueden desaparecer!!- se levantó el chico- ¡¡de otro modo los Digimon jamás digievolucionarían!!

Luna sonríe ante este comentario.

-No es cierto- dice mirando al cielo- eso es lo que les hace falta: descubrir el verdadero significado de los emblemas…

Wallace no entendió esta última frase, pero no quería averiguar.

-Por cierto… ¿qué eres del Digimundo? Porque no sabía que hubiera humanos a parte de Gennai…

-Yo soy la encargada de regir este Digimundo, la que se encarga de mantener el equilibrio de todo lo que ocurre y por eso te llamé…

-¿Eres la Diosa del Digimundo?- preguntó confundido.

-Si lo quieres ver así- se sonroja ante el comentario.

-¿Cuándo veré a Terriermon?

-Paciencia mi elegido… paciencia…

Luna mira de nuevo el firmamento y suspira tristemente. Coloca su mano derecha en su pecho y comprueba que late fuertemente.

-Yamatto-chan…- piensa-… nos volveremos a ver…

Continuará.

Notas:

Bueno, aquí está otra de mis creaciones raras. Je, je, admito que no es mi mejor historia. Por cierto, no sé mucho de este chico, Wallace, así que si notan algún error con respecto a él no le den importancia.

Ah… para los que leyeron “Amistad” (1 y 2) pues… ¡¡Sí, chicos!! ¡¡Es la misma Luna!! Y les recomiendo a los que no los han leído que lo hagan, o de lo contrario habrán cosillas que no entenderán. ¿Por qué ella la “Diosa” ( si así la quieren llamar) del Digimundo? Bueno, es mi personaje ¿qué querían? Que la pusiera de barrendera del Digimundo?

¿Por qué escogí a Wallace en vez de a Matt para ser el que Luna llevara primero? Pues muy sencillo: no tendría gracia que mi “parejita” se reuniera de una vez ¿o sí? Además de que no estaba muy inspirada como para encuentros románticos.

¿Qué onda con el título? Pues ya verán porqué se titula así la historia.

Críticas, sugerencias y demás a kaori_chan_01@yahoo.com