Recuerda: texto en cursiva son recuerdos

Destino y Esperanza.

Por: Marissa Cervantes

 

 

Capítulo 9: “Sentimientos Encontrados”.

 

Sakura se levantó con cuidado y observó a Tomoyo, quien dormía plácidamente en la cama conjunta. Observó el día, era realmente hermoso. Dio un profundo suspiro. No podía creer que hoy en la noche fuera la fecha pactada con Destino para la batalla. Aunque, ahora que se ponía a pensar ¿para qué tenían que luchar? Eso no le había quedado muy claro que digamos; pero por lo menos sabía que Pai estaba dispuesta a ayudarla.

-Bueno días- le sonrió Tomoyo desde su cama, aún acostada.

-Buenos días, Tomoyo- Sakura se levantó rápidamente- creo que es hora de levantarme ya…

-Hoy es el día cero- suspira Tomoyo mirando al techo- creo que no debí aceptar la propuesta de Xiao y Tsi…

-¡¡Nada de eso!!- le reprende Sakura- ¿acaso piensas que te vas a quedar hoy, con un día tan hermoso, aquí sólo porque esta noche es cuando aparece Destino? ¡¡No de lo permito!!

-Pero Sakura… me preocupas…

-Tomoyo- Sakura entrelaza sus manos-…créeme que estaré bien…

-¡Buenos días!!- entra Mei a la habitación- ¡¡Tomoyo; Xiao y Tsi nos están esperando!!

-¿Quiénes irán?- pregunta Tomoyo poniéndose de pie.

-Pues yo, para empezar, creo que también Ken, Kaho no estoy segura. ¡Ah! ¡Eriol también irá!-

Tomoyo se sonroja cuando mencionan este último.

-Enseguida me cambio…- dice dándole la espalda a Mei Ling- ¿les dices que no me demoro?

Mei Ling cierra la puerta y va recorriendo el pasillo, cuando se topa con la habitación de Pai. Era ya de por sí extraño que ella no estuviera despierta ¿Qué le pudo haber pasado? ¿Se sentirá enferma? Mei no lo pensó más y abrió la puerta con cuidado y encontró a Pai en su cama, en el más profundo de los sueños.

Se acercó a ella y se extrañó aún más de que tuviera puesta la ropa de la noche anterior, lo que significaba que habría de haber tenido en realidad mucho sueño.

-Pai…- la llama, moviéndola un poco-… yo creo que ya debes pararte…

Pasan unos minutos y la chica empieza a moverse.

-¿Qué…?- murmura entre sueños.

-¡¡Hora de despertarse!!- le anuncia Mei quitándole las sábanas.

Pai se sienta en la cama con cara adormilada.

-¿Qué te pasó anoche?- pregunta Mei- ¿en verdad te sentías tan mal?

-Kogane, la carta Destino, vino anoche- al ver la cara de Mei Ling se apresuró a decirle que no se preocupara- pero no fue nada importante, hablamos un rato. Después vino Yue y…

Pai quedó en silencio. Recordaba perfectamente toda la conversación que había sostenido con Kogane, que después había llegado Yue pero ¿después?

-¿Ocurre algo?- pregunta Mei al ver su cara de confusión.

-Es que… no recuerdo muy bien qué pasó después… creo que…- entonces notó que tenía la misma ropa de la noche anterior- …debí quedarme dormida y Yue me llevó a la cama…

 

Eriol observaba cómo Nakuru se movía de un lado a otro, mirando sin cesar las escaleras; estaba esperando que Touya bajara. El día anterior, le había prometido estar con ella todo el día, en pocas palabras, una cita. No había que describirla, se veía radiante, y desesperada porque Touya bajara, porque, como había comentado “podía arrepentirse”. Eriol estaba casi seguro de que la proposición de Touya había tenido que ver con lo que Tomoyo habló con él.

-¿Cuándo vendrá?- se pregunta Nakuru.

-Aquí estoy Nakuru- Touya y Yukito bajaron juntos, Touya se aproximó hasta Nakuru y le sonrió levemente. Ella se sonrojó hasta el tope y le abrazó con fuerza. Pocos minutos después aparecieron Sakura, Tomoyo, Mei Ling y Pai.

-Creo que es hora de que vayan a divertirse- sonríe Sakura.

Tomoyo ve a su amiga y recuerda sus palabras y sonríe, sí se divertirá.

-Nosotros iremos por nuestra cuenta- dice Touya tomando a Nakuru de la mano- nos veremos luego, te cuidas, “monstruo”.

-Hermano…- reprende Sakura en tono desafiante.

-Ahora tenemos que hablar- le dice Eriol a Tomoyo.

-¿Sí? ¿Sobre qué?- se sonroja ella.

-Sobre Nakuru y Touya- sonríe él.

-Ah…- suspira desilusionada.

-¿No vas con ellos?- pregunta Pai a Yukito una vez que todos se hubieron retirado.

-Creo que Yue preferiría estar con Sakura- sonríe.

-Tienes razón…- dice Pai- creo que será mejor buscar a Shaoran.

-¡¡Que no QUIEROOOOOOOOO!!!- el grito de Kero hizo que Pai y Yukito miraran hacia arriba, en donde se encontraba Sakura sonriendo nerviosamente, ante un Kero totalmente enojado.

-¿Qué ocurre?- pregunta Yukito.

-¡¡Que no voy a permitir que sea el mocoso quien esté con Sakura!!- grita el pequeño guardián.

-Kero, Shaoran se ofreció, además él sabe mucho de magia… seguro y me ayuda con…

-¡¡¡QUE NOOOOOOOOO!!!!- fue la rotunda respuesta del guardián.

-Ya dijo que yo me encargaré- dice Shaoran entrando en la sala- y no me importa que te opongas…

-¡¡En principio era tu esposa quien ayudaría a Sakura!!- dice Kero mirando a Pai como su última esperanza.

-Lo siento, Kero- sonríe Pai- pero creo que Shaoran le será de más ayuda a Sakura que yo…

-Gracias Pai- sonríe el chico- vamos Sakura…

-Estaremos en la biblioteca- dice Pai llevándose a Yukito (Y a Kero por la colita, porque éste se quería ir en sentido contrario, donde iban Sakura y Shaoran)

Los tres llegaron a la biblioteca. En ese instante, Yukito se transformó en Yue.

-¡¡Ya era hora!!- dice Kero- ¡¡Vamos a separarle de ese mocoso, AHORAAAA!!!

-¡¡No es por eso que me he presentado Kerberos!!- dice Yue, mostrando desesperación ante la actitud de Kero- es para enseñarte algo más importante.

Hizo una seña a Pai, quien se apresuró a sacar un libro, el que habían sacado de la casa de Clow.

-¿Qué es esto?- pregunta Kero acercándose al libro- tiene la marca de Clow…

Kero abre el libro y empieza a leer con detenimiento. No falta decir que a los pocos minutos de lectura ya estaba más que sorprendido.

-¡¡No puedo creer esto!!- se lleva sus patitas a la cabeza.

-Nosotros también nos sorprendimos- dice Yue mirando a Pai de reojo- Pai…

-¿Sí?- sonríe ella volteando a verle.

-Luego tengo que hablar contigo…-

-De acuerdo, mientras terminas de hablar con Kero voy a ordenar un poco estos estantes- dice mirando todos los libros desordenados en los estantes de la biblioteca.

Yue repasa lo ocurrido la noche anterior. Rozó sus labios, recordaba aún el sabor dulce de los labios de Pai. Lástima que ella no lo recordara.

 

…Pai cierra los ojos y también acerca sus labios, hasta que poco a poco van llegando hasta que finalmente llega el contacto. Al principio fue sólo un roce inocente, luego otro roce… y otro más, hasta que ambos quedan sumidos en un beso, un dulce beso que marcará sus destinos… para siempre.

Poco a poco… el beso culmina y se van separando con suavidad uno del otro.

-Yue…- suspira Pai.

Él sonríe y la estrecha contra sí.

-…Yue… ¿Por qué me besaste?

La sonrisa desaparece de su rostro. Pai aún no lo sabe, eso cambia las cosas.

La separa de sí con suavidad y la mira a los ojos.

-Yue…-

Pero él pone su dedo índice sobre sus labios, impidiéndole hablar.

-Lo siento… pero aún no es el momento…

Al decir esto un aura dorada ilumina su mano, la cual pasa por el rostro de Pai, quien cae dormida. Yue la toma en sus brazos y la coloca en su cama con cuidado.

 

Yue da un profundo suspiro. En el fondo le dolió tener que hacer eso, pero él sabe que aún no es el momento preciso. Observó a Pai de nuevo, estaba totalmente dedicada a su tarea de arreglar los estantes, lejana a los pensamientos de Yue. Él la miró de nuevo, entonces pudo escuchar que ella tarareaba una canción.

-…Watashi no sekai…- escuchó cantar a Pai mientras acomodaba los libros- …Ai to koi to fuan de dekite 'ru…

-…Demo souzou mo…- terminó Kero siguiendo el ritmo- ¿dónde he escuchado eso antes? Si mal no recuerdo era una canción que cantaba…

-…la escuché en nuestros tiempos con Clow- lo corta Yue, impidiendo que se le escape algo inoportuno- ¿me equivoco?

-No- dice Kero sentándose encima de la mesa, cerca de Pai- ¿Dónde escuchaste eso?

-¿Yo?- Pai parece sorprendida por la pregunta- pues no estoy muy segura… simplemente me vino a la mente de repente… mi padre me cantaba canciones para dormirme cuando era más niña… ¡¡Tal vez haya sido una de tantas!!- sonríe.

-¿Tu padre?- pregunta Kero.

-Sí, mi padre- sonríe ella.

-Vaya, eso suena extraño, porque generalmente son las madres las que hacen eso…

-Sí, Kero, pero mi mamá murió cuando mi hermana y yo nacimos- dice Pai- de modo que papá era quien se encargaba de eso, por la ausencia de mamá.

-¡Oh, vaya!- Kero se escucha triste- lo siento mucho…

-No hay problema- dice sonriéndole- es algo por lo que nunca me he sentido triste…

-Todo encaja- piensa Yue, escuchando la historia de Pai- definitivamente ahora estoy más seguro que nunca…

 

Tomoyo estaba realmente fascinada. Jamás había visto paisajes tan hermosos, merecían realmente ser plasmados en una cámara, para atrapar su belleza y conservarla durante el pasar del tiempo. Desde que era niña siempre le había gustado todo lo relacionado con el video y la fotografía (eso no hay que aclarárselos). Cuando era niña le agradaba más el video, y no dejaba de grabar a Sakura. Con el pasar del tiempo se fue interesando más en la fotografía y tomó cursos de esta materia y se presentó en algunos concursos, quedando en los primeros puestos en la mayoría de ellos. Al momento de empezar sus estudios universitarios, como decoradora de interiores, no había tenido tiempo para dedicarse a la fotografía pero ahora, aunque fuera un momento de desesperación, había encontrado un momento para dedicarse a ello.

Eriol, por su parte, no dejaba de mirar a Tomoyo; quien iba de un lado a otro tomando fotos y sonriendo. Él siempre había admirado de Tomoyo su dulzura y su capacidad para abrirse con los demás, siempre tratándolos con respeto. Además admiraba su lealtad no sólo hacía su amistad con Sakura, sino que ella se mantenía fiel por encima de todo a sus seres queridos. Realmente podría decirse que ella había sido su primer amor, o lo más cercano a él.

Mei Ling observaba a Eriol, quien miraba fijamente a Tomoyo, mientras sonreía. Tomoyo se había encontrado un buen partido. Luego observó a Xiao y a Tsi, el comentario de Pai había hecho mucha influencia en Tsi y al parecer al fin ella y Xiao formalizarán su relación. Entonces se miró a sí misma, dándose cuenta que estaba sola.

-¿Ocurre algo?- dice Ken acercándose a ella.

-No- sonríe- no es nada…

-Desde esa colina se puede observar un hermoso paisaje- sonríe Tsi- ¿Por qué no vas, Tomoyo? No te digo lo que es porque si no te quitaría la sorpresa.

-¡Sí!- dice poniéndose de pie- ¿Me acompañas Eriol?

-Tomoyo, es que…

-¡¡Alcánzame!!- dice echándose a correr hacia la colina.

Eriol no puede resistirse y va detrás de la chica.

Al llegar a la cima de la colina, Tomoyo queda totalmente asombrada ante lo que ve: Una hermosa cascada, complementada por un pequeño arco iris que se confundía entre las aguas del río.

-Hermoso- sólo pudo decir Eriol al observar el hermoso espectáculo que ofrecía la naturaleza.

-Realmente no me arrepiento de haber venido- sonríe ella- a pesar de que hoy…

El rostro de Tomoyo se ensombreció. Eriol tomó su mano con delicadeza.

-Ella va a estar bien, Shaoran y yo la ayudaremos, al igual que los guardianes- sonríe él.

-Lo sé, es que a veces me siento tan mal por no poder ayudarle y no es justo que ella tenga que cargar conmigo… poniéndola en peligro sólo por protegerme…

-Tomoyo, puede no ayudes a Sakura con magia, pero el apoyarla siempre es algo que vale más que cualquier poder mágico…

-Gracias- sonríe Tomoyo.

Las miradas de ambos se cruzan. Tomoyo puede sentir como sus mejillas se van tornando de un leve rubor al ver los hermosos ojos azules de Eriol. Éste, por su parte, se siente incómodo y desvía un poco la mirada.

-Pero… en otro tema, quisiera saber qué fue lo que le dijiste a Touya. Debió ser un muy buen argumento como para que invitara a Nakuru a una cita…- sonríe él.

-Es una historia larga- dice sonriendo.

-¿Puedes contármelo?- sonríe él sentándose e invitando a Tomoyo a que se sentara junto a él, ella así lo hizo.

-Le dije que tal vez para Nakuru sí era una especie de capricho y si él le hacía caso, ella tal vez ya quedaría saciada y lo dejaría en paz.

-Interesante teoría… ¿qué te hace pensar que funcionará?- dice Eriol mirándola.

-Intuición femenina- sonríe.

-¿Por qué ayudaste a Touya?- pregunta Eriol.

-Creo que él realmente necesita a alguien a su lado, y con Nakuru persiguiéndole todo el tiempo jamás podrá encontrar a esa persona especial…- suspira ella- …creo que todos tenemos derecho a tener a alguien especial, que nos apoye, nos dé cariño y hasta nos regañe cuando sea necesario… alguien, alguien que…

-…que nos llene por completo…- Eriol termina la frase.

Ambos sonríen ante la coincidencia de pensamientos.

-Parece que tenemos la misma teoría con respecto al amor- dice Tomoyo sonriendo.

Eriol la mira de reojo. Esta vez no se quedará callado, debe decírselo, tiene que decírselo, de ello depende su felicidad.

-Tal vez…- toma a Tomoyo por el mentón y hace que ella le mire a los ojos-… tal vez deberíamos poner en práctica esa teoría…

Tomoyo entiende esto perfectamente y sonríe. Se acerca a Eriol lentamente y coloca sus manos en el rostro del chico, él por su parte; rodea la cintura de Tomoyo con sus manos. Sus narices pueden rozarse, pueden sentir la respiración del otro con claridad. Sin embargo, ninguno de los dos parece querer dar el paso siguiente. Permanecen así por unos segundos, que para ellos parecen ser siglos, que sirven para examinarse el alma de cada uno y darse cuenta de que al ponerse en práctica, su teoría no fallará.

-Creo que acertamos en la teoría…- dice Eriol.

-…faltaría consumarla…- Tomoyo se decide y acerca sus labios a los de Eriol. Sus labios se juntan en un tierno abrazo del que no quisieran separarse jamás.

Lejos de ellos, Mei Ling da un suspiro de tristeza.

-Me parece que Tomoyo se me adelantó…- sonríe con amargura.

-¿No has notado que somos los únicos sin estar en plan romántico?- dice Ken señalando a Tsi y Xiao, quienes también están sumidos en un beso.

-¿Qué puedo decir?- dice Mei Ling rodeando sus rodillas por sus brazos- creo que siempre sí me quedaré solterona y tendré que atender a los hijos de Shaoran y sus hermanas en mi vejez…

-No lo creo- sonríe Ken tendiéndose en el suelo- me parece que eres una joven muy interesante, además de hermosa, sólo falta que alguien lo note…

-Como si a la gente la gustara observar- suspira ella.

-Creo que ya alguien lo ha notado- dice el chico mirándola.

-Gracias- sonríe Mei Ling- ¿Entonces te casarás conmigo?

No hay palabras para describir la cara de espanto de Ken cuando escuchó la proposición de la joven china.

Mei Ling lo observaba seriamente, como esperando una respuesta, pero poco a poco en sus labios se fue dibujando una sonrisa hasta que ésta terminó en una carcajada.

-¡¡Pero si era una broma!!- dice mirándole con ternura- ¡¡Debiste ver tu rostro!!!

La cara de Ken fue recobrando el color, pero luego se fue tornando rojo de rabia.

-¡¡¿Qué clase de broma es esa??!!- dice enojado.

-¡¡Una muy buena!! Pero ¿en verdad creías que te estaba proponiendo matrimonio? No puedo creer que te hayas puesto tan pálido- dice Mei aún riendo.

-¡¡Es que yo no conozco sus costumbres!!- se excusa- ¡¡Y menos ahora que sé que son hechiceros!! ¡¡Te juro que pensaba que era una tradición que la chica se le declarara al chico o algo así!! ¡¿Y cómo no quieres que me ponga pálido si una joven hermosa a la que apenas conozco me propone matrimonio?!!

-¿Entonces sí te parezco hermosa?- pregunta Mei Ling.

-Lo que dije no era por cortesía- dice Ken.

Mei Ling sonríe y se pone de pie, extendiéndole la mano.

-Gracias, pero ahora vamos a sacar a esas dos parejitas de su letargo de amor, que ya tanto romance en el aire me está asfixiando!!

Ken sonríe y toma la mano de Mei Ling, quien lo conduce hasta donde Tsi y Xiao. 

 

Por alguna extraña razón, Pai ya no está tan acongojada como antes al ver a Sakura y Shaoran juntos. Aunque, al parecer habrá alguien que siempre dará lucha respecto a este tema.

-¡¡¿Cuándo va a terminar con eso?!!- insiste Kero- ¡¡¡SAKURAAA!!

 Pero antes de que pudiera hacer algo, Pai ya había cerrado la puerta y la ventana, impidiendo su salida hacia el patio, en donde se encontraban los jóvenes.

-¡¡Abre la puerta!!- chillaba Kero- ¡¡No me busques, muchachita!! ¡¡No quieras que me transforme en mi apariencia original y derrumbe esa puerta!!

-Ella podría darte buena batalla- sentencia Yue, sin apartar la vista de lo que está leyendo- de modo que tú tampoco la provoques o podría irte mal…

¬_¬

Si las miradas destruyeran, Yue habría muerto al instante por la mirada que le lanzó el guardián. Sin embargo, él presenció la batalla de Pai contra Destino. La chica no era una hechicera improvisada. De modo que optó por acercarse a la ventana, para vigilar a Sakura un poco. Abrió los ojos de par en par cuando observó lo que ocurría afuera.

-¡¡¡¡¿¿Por qué demonios están tan cerca?!!! ¡¡¡Aléjate de ella mocoso!!!- gritó golpeando la ventana, con la esperanza de que esta se rompiera.

Efectivamente, Shaoran tenía entrelazadas sus manos con las de Sakura, y las de ella sostenían el báculo.

-Como te dije, para esta batalla debes confiar en las cartas y ellas en ti. Eso era lo que decía el escrito de Clow, de modo que a ponerlo en práctica ¿de acuerdo?- sonríe él.

-Sí- asiente ella sonriendo.

Kero sentía que su sangre hervía al ver cómo ambos intercambiaban sonrisas.

-Grrr… MOCOSOOOO!!!- continúa golpeando la ventana- ¡¡deja que te tenga entre mis manos!!!
-Cálmate, Kerberos- se escucha una voz femenina al mismo tiempo que la puerta se abre- no tiene nada de malo que tu ama tenga buenos amigos tan poderosos…

Al voltearse, pudieron notar que se trataba de Kogane, quien sonreía a los tres.

-Parece que no les da gusto verme- dice acercándose y sentándose en las piernas de Yue- ¿tú sí, hermanito?

-Sí- dice Yue- claro que sí, anoche fue la mejor noche gracias a ti…

-Pues para mí no fue la mejor noche- sonríe ella- hoy será la mejor noche.

-¡¡Sí, pero para Sakura!!- sale Kero en la defensa de su dueña- ¡¡porque ella hará que comas polvo!!
-Por su bien espero que así sea, Keroberos- sonríe Kogane.

¬_¬

Otra mirada destructiva.

Pai sólo puede sonreír ante esta escena que se le hace tan… ¿familiar?

-¿Y qué me dices, Pai?- dice Kogane mirando a la chica- ¿ya arreglaste tu problema con Shaoran?

Kero levanta su orejita al escuchar eso.

-¿Problema con el Mocoso?- pregunta la bestia del sello.

-Aún no- suspira- pero creo que antes de esta noche le diré que puede romper nuestro compromiso.

-¿Compromiso?- dice Kero atónito- ¿Qué no están casados? ¿De qué compromiso hablan?

-¿Qué Keroberos no sabe que son sólo novios?- sonríe Kogane, adivinando la reacción de Kero- pues que lástima, porque yo pensaba que él sería el primero en felicitarte Pai, ya que nada te ata al “mocoso”

-¿No eres la esposa del mocoso?- pregunta Kero acercándose a Pai.

-No, Kero, en realidad sólo soy su prometida- sonríe Pai nerviosamente.

-¡¡¡¿Qué?!!- Kero abre los ojos de par en par- ¡¡¿Cómo es eso?!!

-Ni prometidos- sonríe Kogane- porque esta noche dejarán de serlo…

Kero guardó silencio por unos segundos. Permaneció inmóvil, viendo cómo lo único que mantenía “separados” a Sakura y Shaoran no era más que una vil farsa. Cuando pudo reaccionar, lo primero que hizo fue correr hacia la ventada, y golpearla con todas sus fuerzas, mientras se le revolvían las entrañas al ver a Sakura sonriendo con Shaoran.

-¡¡¡SAKURRAAAAAA!!! ¡¡¡¡NO LA TOQUES MOCOSO!!!!!-

 

La observa detenidamente. Está totalmente feliz, se ve radiante, sonríe, pensando que al fin realizó su cometido. Touya Kinomoto da un suspiro y cierra los ojos.

-¿Ocurre algo, Touya?- pregunta Nakuru, mirando con curiosidad a su compañero.

-Luces hermosa, Nakuru- dice Touya, pensando con detenimiento cada palabra que le dirá a la chica.

-Gracias- dice ella totalmente sonrojada- tú también estás muy guapo hoy…

-Es por la ocasión- sonríe con dificultad. Pero al parecer, Nakuru cree la autenticidad de la sonrisa.

-Touya… me dijiste que tenías algo en verdad importante que decirme- sonríe Nakuru mirando al chico- ¿qué era?

Touya traga en seco. Es ahora o nunca.

-Bien Nakuru- se dice a sí mismo para darse fuerzas- veamos qué tanto capricho soy para ti…

Touya se acercó a Nakuru lentamente. Ella notó esto, pero no se alejó para nada. Al contrario, se acercó para facilitar el acercamiento.

-Vamos Touya- piensa el chico- piensa que es sólo un beso… y después se termina mi sufrimiento…

El chico toma a Nakuru y con cuidado la atrae hacia él. Lentamente, sus labios se unen. El beso parece no tener fin; pero, contrario de toda lógica, es Nakuru quien lo rompe.

-Nakuru…- Touya siente que su corazón late a mil por hora. Pero es que espera con ansiedad un rechazo de Nakuru. Todo su ser desea que la chica le diga que eso fue una gran equivocación. Nakuru le observa con mucha seriedad en su rostro, al ver esto Touya celebra su victoria, pero, poco a poco, con horror nota que esa seriedad se va transformando en una hermosa sonrisa.

-¡¡Lo sabía!!- dice abrazándole con fuerza- ¡¡Sabía que tarde o temprano tú me amarías, Touya!!

Una GRAN gota de sudor apareció en la cabeza de Touya Kinomoto, mientras maldecía a Tomoyo por darle una idea tan estúpida y también se maldecía a sí mismo por haberle hecho caso.

 

-Toma- dice Kogane extendiendo hacia Yue un papel.

-¿Qué es?- pregunta el guardián tomando el papel entre sus manos.

-Es para volverla a ver- dice la chica bajando la mirada- siempre fue tu favorita…

Yue abrió lentamente el papel y leyó su contenido. Miró a Kogane, quien sonreía. Yue se acercó a ella y le dio un abrazo.

-Gracias- sonríe él- muchas gracias…

Kero, que estaba aún maldiciendo a Shaoran, quedó estupefacto al ver esta reacción de parte del guardián. Pai, por su parte, se sintió un poco extrañada al ver la escena, le producía cierta… ¿nostalgia?

-Bueno…- Kogane se separa de Yue avergonzada-… si me disculpan… quiero hablar con unas amigas…

-¿Amigas?- se extrañó Pai.

Kogane se acercó al Libro de las Sakura Cards. Estaba vacío, era lógico, Sakura las estaba utilizando. La chica dio un suspiro y alzó su mano derecha. Entonces las cartas “Luz” y “Oscuridad” se levantaron, ante el asombro de Sakura y Shaoran, atravesaron la ventana y quedaron suspendidas en la biblioteca, ante los presentes. Sakura y Shaoran se empezaron a preocupar, pero Pai desde la ventana les hizo señas de que no había nada de qué preocuparse.

-Vamos… muestren su verdadera identidad- ante estas palabras de Kogane, “Luz” y “Oscuridad” mostraron su verdadero aspecto.

-¡Destino!- se asombró Oscuridad- ¿En realidad eres tú?

-Sí- sonríe Kogane- es que tengo algo que hablar con ustedes…

-Será mejor dejarlas solas- dice Pai llevándose de allí a los dos guardianes. Sin embargo, pudo notar que Luz no le quitaba la vista de encima, hasta que salió de la habitación.

-¿Qué tan importante es lo que tienes que hablar con nosotras?- pregunta Luz.

-En realidad nada- sonríe sentándose- era sólo para ponerle ritmo melodramático al asunto… y obligar a que ellos se fueran…

-Esta noche tal vez nuestra dueña nos usará para luchar contra ti- dice Luz- no puedes culparnos si te atacamos…

-Jamás lo haría- sonríe- ya que ahora estamos en “bandos contrarios”

-Destino… yo pensé que Esperanza estaría contigo- dice Oscuridad- ¿Qué acaso ella no fue encerrada también en un cuerpo humano?

-Sí… creo que así fue…- dice desviando la mirada.

-De eso precisamente te iba a preguntar- dice Luz mirando hacia la puerta- hace un momento… me pareció… me pareció sentir que…

-¿Estaba cerca de nosotras?- sonríe Kogane cerrando los ojos-… tal vez no estés lejos de la realidad…

-¿Quieres decir que…?-

-¿A qué se refieren?- pregunta Oscuridad extrañada- yo no sentí nada…

-“El Destino es una oscuridad impredecible, mientras que la Esperanza es una luz en la adversidad”- dice Kogane aún con los ojos cerrados- esas fueron las palabras de Clow Li al terminar nuestra creación… nuestras “vidas” están ligadas. El Destino y la Oscuridad y la Esperanza con la Luz. Es normal que no hayas notado lo que Luz notó…- dice mirando a Oscuridad.

-Yue- dice Luz- ¿Él lo sabe?

-El segundo en enterarse- suspira- pero la única que no está enterada es ella… ¡Qué ironía!

-Creo que es hora de que yo entre en este juego- dice Luz traspasando la pared.

 

-…Demo souzou mo shinai mono…- cantaba Pai mientras entraba en su habitación.

-…kakurete 'ru hazu…- continúa Luz entrando en la habitación de la chica, quien queda asombrada al verla- linda canción. ¿De dónde la sacaste?

-¿Qué hace aquí?- pregunta Pai.

-Lamento haber entrando así- se disculpa- pero es que necesitaba…

-¿Qué necesitaba?

Luz hace una pausa y observa a Pai por unos instantes. Luego sonríe y acerca su mano semitransparente a la mejilla de Pai, quien se siente totalmente confundida por la reacción de aquella Carta, a quien nunca en su vida había visto, pero por alguna extraña razón, se le hacía conocida.

-Necesitaba decirte…- Luz acaricia la mejilla de la chica.

-Decirme… ¿Decirme qué?- pregunta Pai.

-Que tal vez necesites un poco de luz… un poco de luz… para recuperar… recuperar tu “esperanza”-

Aquella palabra.

Sólo una palabra.

Una pequeña e insignificante palabra.

Sin embargo, puede cambiarlo todo.

 

Shaoran sube las escaleras con suma calma y suavidad. Ya faltan pocas horas para que el sol se ponga y Destino aparezca. No sabe cuál será el resultado de esta batalla o qué consecuencias tendrá, pero está seguro de una cosa. No se casará con Pai. Por ningún motivo lo hará. Quiere a Pai muchísimo, pero nunca podrá amarla, nunca podrá amarla porque desde que tiene once años, su corazón sólo lo ha ocupado una persona: Sakura Kinomoto.

Sin embargo, no deja de dolerle en el alma tener que decírselo. Pai había estado allí cuando él sufría por Sakura. Cuando, por más que le escribía, sus cartas jamás eran contestadas. Ella estuvo allí cuando él decidió no escribirle más a Sakura, porque pensaba que ella ya había enterrado su amor. Y también estuvo allí para muchas otras tristezas, como tantas otras alegrías. Pero siempre allí, junto a él. ¿Era justo? No, no lo era. Pero él ya no quería seguir jugando. Ahora estaba seguro de que amaba a Sakura y no la dejaría esta vez.

-No- repite en voz alta para darse valor- esta vez no la voy a dejar ir…

Y allí estaba. Frente a la habitación de Pai. Vaciló un par de segundos antes de tocar a la puerta. Es que en verdad no quería imaginar la reacción de Pai. ¿Y si ella sí le quería de otra forma? Jamás se lo perdonaría.

Tocó la puerta. Pasaron unos segundos y nadie abrió. Tocó de nuevo y al fin Pai abrió. La habitación estaba en penumbras, lo notó Shaoran desde fuera.

-¿Puedo pasar?- pregunta el joven.

-Sí- responde ella cerrando la puerta cuando él estuvo dentro.

-Pai… yo… yo quiero hablarte. Es de algo que nos concierne a los dos. Sé que prometí que nos casaríamos, incluso tomé la iniciativa de comprar el anillo de compromiso. Pero… yo… en estos días, me he dado cuenta de que… yo… amo… amo… a Sakura…- dice cerrando los ojos.

Espera alguna cachetada, algún sollozo, algún grito o demás. Pero… nada.

Entonces observa que Pai tiene la mirada en el piso.

-Pai… ¿te ocurre algo?- pregunta preocupado.

-Amas a Sakura…- repite ella- en realidad nunca la dejaste de querer…

-…- Shaoran está extrañado de la reacción de la chica.

-Y ella… ¿te ama?

-Sí… creo…- se sonroja.

-Te deseo lo mejor- dice sin ánimos- de todo corazón, te lo mereces…

-Pero… ¿no te importa que no haya matrimonio?- pregunta Shaoran.

-Oh… no… en verdad no importa- dice ella con desgano- es para buscar tu felicidad…

Ambos permanecen en silencio por unos minutos. Shaoran mira con preocupación a Pai. ¿Qué le ocurre?

-Shaoran… no me siento del todo bien… ¿podrías irte?- le pide ella.

-Sí, pero ¿seguro que no importa?

-Descuida- dice antes que él cierre la puerta- en verdad no importa.

Cuando escucha el sonido de la puerta cerrarse. Las lágrimas empiezan a salir de su rostro.

-No importa…- dice tirándose en su cama- en verdad ya no importa nada…

 

Observaba el papel que tenía en sus manos. Con sólo leerlo podría cambiar el desenlace de todo. Pero ¿tendría el valor para hacerlo?. Yue dudaba de eso.

-¿Aún preocupado?- la silueta de la Carta Luz apareció detrás del guardián.

-Sí… ¿para qué mentirte?- suspira.

-Yue…- Luz le abraza por detrás-…sabes que yo más que nadie espero que… que ustedes sean felices…

-No me recordó- dice bajando la mirada en tono frío- no lo recordó…

-Sí… tal vez tengas razón. Pero recordó lo que sentían… que según mi criterio es lo más importante…

-…-Yue había quedado sin habla después de estas palabras.

-No cometas el mismo error Yue… la primera vez la dejaste ir sin poder confesarle nada. Ahora la tienes allí, a unos pasos de ti… no la dejes ir.

-Pero no me recuerda…

-Tienes en tus manos el medio para que te recuerde- dice ella tomando en sus manos el papel.

-No me recordará a menos que pronuncie esas palabras- dice él con ojos fríos- no lo haré… la dejaré ser feliz… como una humana…

-Aunque no tuvieras esto en tus manos- dice poniéndose frente a él- tienes lo primordial para hacerla feliz, algo que nadie podrá reemplazar- dice colocando su mano sobre el pecho de Yue-… yo recuerdo… recuerdo aquellos momentos. Ella sonreía, sonreía con una felicidad infinita.

Yue alza la mirada y le sonríe a Luz.

-Gracias- dice tomándole la mano- creo que lo necesitaba…

-Después del error que cometí… creo que es lo menos que puedo hacer- sonríe ella.

-No fuiste la única culpable- sonríe él.

Luz se sonroja ante la mirada profunda del guardián. Yue interpreta el rubor en las mejillas de ella, sabe que aún su corazón no está libre de las cenizas que dejó aquel incidente.

-¿Puedo?- alza la mirada Luz- te prometo que…

-Sh…- la calla él- es lo último que necesitamos para cerrar ese capítulo de nuestras vidas…

-…y comenzar de nuevo…- sonríe.

-Después de eso… la traeremos de vuelta…- dice acercando su rostro con el de ella.

Ambos acercan sus rostros y rozan sus labios, dándose un leve beso en los labios.

-Yue, me parece que Sakura…- Pai queda paralizada al ver la escena. Unas escenas invaden su mente.

Sus labios se unen, quedando sumidos en un leve beso.

Justo en ese instante, se abre la puerta y ella entra, quedándose paralizada.

¡¡La está besando!!

¡¡Le está besando!!!

¡¡Se están besando!!!

¿Por qué? ¿Por qué?

Ve como ambos voltean hacia ella, sorprendidos. Él la mira estupefacto y ella, “la otra”, trata de justificarse con la mirada. Pero ella ya no quiere saber más.

Sin saber cómo, sin saber por qué.

Pero la historia se repite.

-Pai- Yue se acerca a ella y trata de tomarle la mano, pero ella se rehúsa-… verás… yo… nosotros…

-Sakura quiere que estés con ella- le dice- me pidió que te llamara.

-Pai…

-Te está esperando- dice sin mirarlo- baja con ella.

Yue la mira, luego mira a la carta Luz. Finalmente decide salir y acudir al llamado de Sakura.

Luz puede sentir la mirada asesina de Pai sobre ella.

-Pai… yo…

-Quiero preguntarte algo. ¿Qué me hiciste?- pregunta desconcertada.

-¿Perdón?

-Es que desde que pronunciaste esa palabra- dice frotándose la frente- todo en mi cabeza ha estado dando como vueltas. Recuerdos que se confunden… sentimientos que se mezclan…

-¿Sentimientos?- pregunta Luz.

-Sí, sentimientos… como… como ahora- suspira- no sé… de repente, al verte allí, besándote con Yue… sentí… como si… sintiera… ¿celos?

Luz sólo sonrió y le dio un beso en la frente. Y así, sin más, desapareció, convirtiéndose en una carta; que Pai tomó en sus manos, quedando más desconcertada aún.

 

-Dice Pai que me necesitabas- dice Yue bajando a la sala, en donde ya se encontraban Eriol, Tomoyo, Nakuru, Mei Ling y Ken; junto con Xiao y Tsi.

-Sí- sonríe Sakura- bueno en realidad, necesitamos a Yukito. Es que Touya está un poco… fuera de control…- sonríe ella nerviosamente.

-Entiendo- dice el guardián, desplegando sus alas y volviendo a su forma humana.

-¿Qué pasa?- dice Yukito.

-Es Touya- suspira Tomoyo- creo que necesitamos que le hables. Está afuera.

-Enseguida voy- dice Yukito saliendo del salón.

-Espero que mi hermano se controle- dice Sakura- en realidad no sé que le pasó… estaba como descontrolado. ¿Por qué habrá sido?

Justo cuando hacía estos comentarios, pudo notar que las manos de Tomoyo y Eriol estaban entrelazadas.

-Tomoyo, Eriol… este… disculpen si no es de mi incumbencia, pero- entonces la chica señaló sus manos. Ambos jóvenes se sonrojaron, pero sonrieron.

-¿Ustedes…?

Entonces Eriol besó a Tomoyo en los labios, para el asombro de Sakura.

-Espero que esto responda a tu pregunta- sonríe Eriol.

-Tomoyo…- Sakura se puso de pie y abrazó a su amiga-… ¡¡Felicidades!!!

-¡¡Gracias!!- sonríe Tomoyo.

-¡¿Ya les conté de mi romance con Touya?!!- dice Nakuru entrando en la conversación.

-¿Qué?- preguntó Sakura extrañada. ¡Ahora sí sabía por qué su hermano estaba tan disgustado! Tomoyo sólo sonrió nerviosamente ante su amiga, no quería ni imaginarse si se enteraba que ella era quien había propiciado todo eso.

 

Yukito dio un profundo suspiro al ver la actitud de su amigo Touya. En realidad él se esperaba encontrar a Touya gritando e insultando a diestra y siniestra. Pero, por el contrario, se había topado con un joven quien ya estaba cansado de la situación que tenía con una chica, que no entendía que su “relación” no iba para ningún lado, entiéndase Nakuru.

En cierto modo, Yukito comprendía a Touya. En verdad ya era asfixiante la relación que mantenía con Nakuru, pero también se ponía en el lugar de la chica, quien seguramente ahora debía estar pensando que al fin Touya le correspondía y que su sueño se había cumplido, cuando la realidad era otra.

-¡¡Es que aún no lo puedo creer!!- suspira Touya sentándose al pie de un árbol- ¿Dime qué hice mal, Yuki?

-Creo que lo mejor es que seas sincero con ella- dice Yukito de pie, mirando a su amigo- no tiene ningún caso que le mientas… sólo empeorará las cosas.

-¿Cómo le digo?- suspira él- no es que me importe que se ponga triste, lo que temo es que no me entienda y siga con la misma historia de perseguirme y acosarme.

-Mejor y se lo dices cuando esto termine- sonríe Yukito- creo que estarás menos tenso…

 

Horas después.

Todos voltean a mirar el reloj de la sala. Diez minutos. Faltan sólo diez minutos para que el sol se oculte. Shaoran mira a Sakura de reojo. Está preocupado por ella… pueden pasar tantas cosas en la batalla contra Destino…

Touya también mira a su pequeña hermana. Tiene tanto miedo, pero no puede dejarlo ver, de lo contrario sólo afectaría más a Sakura y no quiere que eso pase.

Eriol toma la mano de Tomoyo. Él sabe que ella está preocupada por su amiga, sabe que Tomoyo daría su vida con tal de no ver en esta situación a su amiga. Pero ahora lo más importante es que Tomoyo le tiene a él, para protegerla y cuidarla… siempre. Está decidido a casarse con ella cuando la batalla termine.

Mei Ling da un suspiro. ¿Hasta cuándo terminará este ciclo? Siempre, desde que era una niña, ha visto a su primo y demás miembros de su familia, en batallas, guerras entre clanes. Pero, ella nunca ha sido de gran ayuda. Eso la tiene sumida en una angustia terrible. Pero sus pensamientos son interrumpidos por la mano de Ken, que la coloca sobre su hombro. Ella le voltea y le sonríe levemente, agradeciéndole el apoyo.

Kaho está visiblemente preocupada. A su mente vuelven aquellas visiones. Alguien tratando de proteger a otro… cayendo al suelo… sangre… gritos de dolor… inconscientemente, busca el hombro de Touya para apoyarse en él. El chico la recibe, dejando que se acomode en su pecho; lo hace sonriendo, aunque del otro brazo tenga tendida a Nakuru.

Xiao y Tsi permanecen más alejados del grupo. Ambos están abrazados, se sienten un poco fuera de lugar allí, pero saben que van a ayudar en lo que sea necesario.

Yukito, por su parte, está pensativo en un sillón. Se siente extraño. Él puede sentir cuando algo en Yue está mal. Sabe que Yue no está pasando por un buen momento. Algo dentro de Yue está cambiando y, como consecuencia, algo está empezando a cambiar dentro de él. Yukito es sólo un caparazón para cubrir a Yue y cuando éste cambia, Yukito también lo hace.

Se escuchan pasos. Todos se preocupan, pero sus miedos se disipan al notar que se trata de Pai. Shaoran la observa de nuevo, la chica se ve completamente distinta y extraña. En el fondo él se siente culpable de la situación de la chica. Él se pone de pie al ver que la chica camina hacia él. Pero para su sorpresa y la de todos, ella pasa de largo y se coloca frente a Yukito, quien levanta su mirada y la observa por unos instantes.

Ninguno de los dos comprende que pasa ahora mismo con sus sentimientos pero, de lo que pueden estar seguros, es que se necesitan el uno al otro. Yukito se pone de pie y le sonríe a la chica como sólo él sabe hacerlo. Pai también lo hace y cierra sus ojos por unos instantes, para luego lanzarse a los brazos del chico.

 

Un viento frío abre con violencia todas las ventanas. Logra interponerse entre Pai y Yukito y romper su abrazo. Sakura se pone de pie de inmediato y saca la llave, la cual aprieta con fuerza mientras escucha el rápido palpitar de su corazón.

Se van escuchando leves pasos a los lejos, entonces notan que un leve brillo plateado está en el centro de la habitación y que poco a poco se va transformando en la hermosa figura de Destino. Destino tiene básicamente la misma apariencia que Kogane, sólo que de un aspecto más fantasmal, por así llamarlo. Tiene colocadas un vestido muy similar a los que usan las Cartas “Luz” y “Oscuridad”, en un tono azul plateado.

-Lamento haberles hecho esperar- dice, su voz también es similar a la de Kogane, pero con un sonido más profundo- Sakura, empecemos cuando tú gustes…

Un sudor frío recorrió toda la espina dorsal de Sakura al escuchar estas palabras.

 

CONTINUARÁ…

 

Notas de Autora:

Okiss… un capítulo sin mucho sentido y coherencia. Ya lo sé… además de que me demoré en terminarlo. Si la última parte la hayan muy tonta… pues cúlpenme, pero es que de verdad no tenía mucha inspiración que digamos. Bueno, mejor dejemos eso allí.

Les tengo una noticia…. ¡¡Quedan 2 capítulos de la historia!! ¡¡Así es!! ¡¡Sólo 2 capítulos y esto se acaba!! De modo que ahora sí a estarse atentos. Sólo que van a tener que esperarse tal vez, porque mis exámenes finales se aproximan, pero pronto terminaré la historia.

 

Avances para el siguiente (y penúltimo) capítulo: aunque al principio Destino se muestra digna y respetuosa, al poco tiempo Sakura se da cuenta de que la batalla será más difícil y que ganar lo estará aún más. En medio de la batalla, Destino confiesa que sí es la culpable de lo que Pai tanto sospechaba; y también confiesa que otras cosas más, que hacen que Sakura reaccione y luche con todo. Pero al parecer, ni con las cuatro cartas de ataque puede hacerle un daño considerable a Destino, quien se sumerge en la mente de Sakura, sumiéndola en sombras y desconcierto. Justo en ese momento, Mei Ling lee por error un pequeño papel… que cambia por completo la situación.

 

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